Los Premios Duna del Grupo Ecologista Mediterráneo cumplen 35 años desde que en 1986 fueran instituidos como un reconocimiento a personas, colectivos, empresas o instituciones por su contribución a la defensa del medio ambiente almeriense, la correcta gestión de los recursos naturales ya búsqueda de modelos de desarrollo sostenible.
Este lunes se celebraban para hacer entrega de las dos ediciones que tuvieron que postponerse a causa de la pandemia.
Cinco premiados en las dos ediciones de COVID-19
La Estación Experimental de Las Palmerillas de Cajamar, por sus casi 50 años investigando y desarrollando soluciones para cuestiones clave en la agricultura actual como el ahorro de agua, la agricultura ecológica o el cuidado de los suelos para preservar su productividad. Un premio muy agradecido por el director de Sostenibilidad de Cajamar, Roberto García Torrente.
El siguiente, aún de 2019, para la emisora local de Onda Cero, por los 23 años de su Concurso de Fotografía de los Espacios Naturales de Almería, que han permitido difundir los valores de estos entornos y generar un valioso banco de imágenes que reflejan la riqueza del medio ambiente de la provincia.
Los premios de 2020 se iniciaron con la empresa Frutilados del Poniente, una iniciativa que partió del Ayuntamiento de El Ejido (recogió el premio el alcalde, Francisco Góngora) que ha integrado a 26 empresas del sector; su labor es recoger los restos vegetales, con frecuencia destinados a los vertederos, y fabricar con ellos alimento para la ganadería, un ejemplo de economía circular.
El segundo para la activista ambiental Céline Feutry, capaz de reunir en unos pocos días más de 200.000 firmas contra el proyecto de hotel en Los Genoveses.
Y el tercero para la periodista almeriense Isabel Jiménez Pedrosa, presentadora de los informativos de Tele5, por su sensibilidad con los temas ambientales y su implicación en proyectos como la creación de una marca de moda sostenible, el proyecto ‘No Plastic’ o el ‘Slow Life, entre otros.
Carbón para dos ayuntamientos, la Junta y el MITMA
Como cada año se dieron a conocer las menciones Carbón, aquellas que se dirigen a quienes con su actividad, su actitud o su inactividad permiten el deterioro de las condiciones ambientales o la salud de nuestro territorio.
En este caso se los repartían la ciudad de Almería por la suciedad de calles y entornos, la salida de aguas fecales en la desembocadura de la Rambla, o los vertidos y escombreras.
Al Ayuntamiento de Níjar por su escasa acción frente a los intentos de construir hoteles en zonas de especial protección del Cabo de Gata, como Los Genoveses.
A la Junta de Andalucía, por esa misma razón y por la presencia de residuos plásticos repartidos por ramblas, campos, espacios naturales e incluso el mar. Misma razón para conceder el Carbón al Ministerio de Transición Ecológica, lento en la respuesta ante esos mismos problemas y en la gestión de problemas que estropean los entornos naturales almerienses.
Sólo el Ayuntamiento de Almería estuvo presente en la gala de entrega a través de su concejal Margarita Cobos, que expresó su deseo y su voluntad de cambio, agradeció esa labor crítica del GEM, expuso algunas de las medidas que se están adoptando para corregir la situación y también su deseo que, gracias a esa gestión, “lleguemos a ser merecedores algún día de uno de los Premios Duna”.
- Trota Músicas pondrá ritmo a las noches de verano en Almócita todos los fines de semana
- Interceptados 1.500 kilos de hachís en el desembarco de una narcolancha en la playa de Torregarcía
- USTEA denuncia la situación de la escuela pública en Almería con supresión de aulas y ratios ilegales tras el proceso de escolarización
- Mueren cinco gacelas, dos de ellas hembras a punto de parir, tras el Festival Alamar en el parque de la Hoya
- La Asociación AlVelAl lanza el I Fondo Esencias