Según la Ley Orgánica Régimen Electoral General:
«Durante los cinco días anteriores al de la votación queda prohibida la publicación y difusión de sondeos electorales por cualquier medio de comunicación. El objetivo de esto es permitir la reflexión no condicionada del votante.»
«No puede difundirse propaganda electoral ni realizarse acto alguno de campaña electoral una vez que ésta haya legalmente terminado.»
«Ni en los locales de las Secciones ni en las inmediaciones de los mismos se podrá realizar propaganda electoral de ningún género. Tampoco podrán formarse grupos susceptibles de entorpecer, de cualquier manera que sea, el acceso a los locales, ni se admitirá la presencia en las proximidades de quien o quienes puedan dificultar o coaccionar el libre ejercicio del derecho de voto.»
Algunas consideraciones
En tiempos de especial inestabilidad en las que el sistema está en juego y cada detalle debe ser cuidado, podría tener razón de ser esta clase disposiciones, pero, ¿tienen sentido hoy día?
Las ciudades están plagadas de propaganda que -lógicamente- no se retira finalizada la campaña electoral, las redes sociales siguen trufadas de simpatizantes trabajando por sus candidaturas tanto la jornada de reflexión como el mismo día electoral, pero yendo más allá, ¿alguien puede creer que repartir panfletos a las puertas de un colegio electoral puede desestabilizar unas elecciones? Siempre que el respeto a los demás presida cada situación no debería haber problema.
Es más perjudicial –al menos para la estabilidad mental del votante- ver el insufrible paseo en ropa sport de los candidatos por los parques acompañados de sus parejas, en la mayoría de los casos, una caminata a media mañana en hora punta de chándal, perro y niño.
España avanza con una democracia aún joven, el camino no ha sido fácil, pero ha tenido la oportunidad de demostrar su madurez en multitud de ocasiones y quizá va siendo hora de revisar algunas cuestiones que parecen no acercarse a la realidad en la que vivimos.
Otro ejemplo
No se pueden difundir resultados de sondeos 5 días antes de los comicios, pero se siguen realizando, los medios y los partidos los conocen, por tanto, ¿por qué la ciudadanía no puede tener acceso también? Si queremos una sociedad madura y responsable no deberíamos tratarla como si fuese incapaz de tomar sus decisiones de manera libre o se dejase llevar por unas simples estimaciones. Y aunque así fuera, está en su derecho.
El caso contrario lo encontramos en Estados Unidos, se hace campaña hasta el último minuto, incluso se publican encuestas cuando todavía no han cerrado algunos colegios, es democracia electoral en vena, si en la costa Este el resultado es x, en la costa Oeste lo conocen antes de ir a votar. Los aledaños de las instalaciones de voto se convierten en trincheras de voluntarios que buscan rapiñar los últimos apoyos. Se han llegado a improvisar mítines ese mismo día si se estima que pueden ser necesarios.
Quizá en el término medio esté la virtud, pero en la sociedad del conocimiento no es lógico prejuzgar que una determinada información o petición de voto pueda poner en riesgo el sistema, más bien al contrario.
Un comentario
Reflexionemos,si,pero no nos dejemos llevar por aquellos pillos que siempre aparecen a ultima hora,intentando que aparezca algo que desestabilice la opinion libre de todos y cauno de los ciudadanos.Ernesto.IU Adra