En la puerta del Centro de Educación Infantil ‘Travesuras’, en el municipio de El Ejido, ayer había un visitante muy especial. Un bebé de unas seis horas de vida aproximadamente, según los cálculos posteriores de los facultativos, se encontraba abandonado sobre las 13:00 horas hasta que uno de los padres de la guardería, al ir a recoger a su hijo, se lo encontró en el interior de una bolsa de deporte. Estaba muy cerca de la puerta, por lo que la intención de quien lo dejara allí era que lo encontraran rápido, pero el plástico de la bolsa negra en la que lo metió para no levantar sospechas de los viandantes no era el lugar medio, ni mucho menos.
Tras unos momentos de total desconcierto por parte de todos ante una situación tan dura, ya se pudo precisar que se trataba de una niña preciosa, de tez morena, con rasgos sudamericanos. Al comprobar que estaba viva y que respiraba con normalidad, ya se alertó a la Policía Local de El Ejido, que acudió rápidamente a la puerta del centro educativo. Para estos casos, más habituales de lo que parece, está disponible un protocolo de actuaciones que siempre se cumple y que comienza con la llamada al 061. La ambulancia, previa revisión, trasladó a la pequeña hasta las instalaciones del Hospital de Poniente, en el que siguió dicho protocolo con el reconocimiento pediátrico pertinente.
No había signos de que hubiera nacido en un centro sanitario, sino que parecía claro que su madre la había traído al mundo sin ayuda de ningún médico ni comadrona. De hecho, un trozo de media ataba el cordón umbilical y había restos de sangre que no habían sido limpiados. La cremallera de la bolsa que la contenía estaba abierta e iba vestida con ropa celeste, lo que en principio hizo pensar que se trataba de un niño. Además, junto al bebé se encontró una carta escrita supuestamente por la madre, que a buen seguro que tenía la intención de que se encontrara pronto a su hija, por el lugar y por la hora del abandono, amén de por sus palabras en el papel. Parece incluso que su primera opción fue dejarla en alguna casa particular, cosa que no consiguió
El mayor peligro que ha corrido ha sido el de la deshidratación, si bien se minimizó por las circunstancias antes comentadas, ya que se ha concluido que debió de ser abandonada apenas 10 minutos antes de haber sido encontrada. La actuación del padre que la sacó de la bolsa de deporte, de los vecinos del tranquilo barrio residencial en el que se encuentra la guardería, y de los trabajadores de la misma, han sido determinantes para salvarle la vida, mientras que la Policía Local ejidense aplicó el protocolo a la perfección e inició las diligencias oportunas para esclarecer los hechos y dar con el paradero de la madre. Eso es algo que ahora está en manos del Cuerpo Nacional de Policía.
El estado en el que se encuentra es bueno. Su salud no corre ningún peligro y en breve podría recibir el alta. Una vez suceda esto, pasará a estar a disposición de la Junta de Andalucía, que activará otro protocolo, en este caso de adopción, previo paso por uno de los centros de acogida que la administración autonómica tiene en la provincia de Almería. Ya sólo le falta que le pongan un nombre.
2 respuestas
que noticia mas triste, de verdad pienso en lo mal que lo habra pasado la madre para llegar a esa situacion, en fin, espero que pronto le encuentren una familia que la cuide de por vida
vaya madre, qué asco de gente. que lo hubiera pensado antes de hacerla