El observatorio de Calar Alto ha permitido desvelar las características de un centenar de galaxias cercanas, a través del proyecto Califa (Calar Alto Legacy Integral Field Area survey), y ha hecho un muestreo de más de 250.000 espectros individuales que se ha puesto a disposición de la comunidad científica para distintas investigaciones.
Un estudio de calidad de las galaxias, que ha conseguido hasta ahora unas 1.000 descargas por parte de grupos de investigación, en el que se puede determinar cómo crecen y evolucionan, cómo se forman las estrellas, cómo migran dentro de la galaxia y qué movimientos realizan, su velocidad, su edad estelar y su composición química, entre otras cuestiones. Esto permite ampliar la información de que se disponía hasta ahora procedente de estudios parciales.
Hasta la fecha, Califa ha escudriñado 266 objetos estelares de las primeras cien galaxias, aunque el objetivo de los investigadores es alcanzar las seiscientas. La nueva herramienta se ha transferido a la comunidad científica a través de una quincena de congresos y más de una treintena de charlas.
El observatorio de Calar Alto garantiza con el sondeo Califa, 250 noches de observación en tres años mediante el telescopio reflector Zeiss de 3.5 m.