El delegado territorial de la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, José Manuel Ortiz, ha entregado esta mañana resoluciones de ayuda por un importe global de 580.567 euros a 26 Agrupaciones de Producción Integrada en Agricultura (API) y a una agrupación de olivar. Estas ayudas, correspondientes a la campaña agrícola 2011-2012, tienen por objetivo fomentar la competitividad del sector agrícola con la mejora de la calidad de los productos agrícolas a través de las API que participan en el programa de calidad ‘Producción Integrada de Andalucía’, en el marco del Programa de Desarrollo Rural 2007-2013.
Las ayudas se destinan a costear gastos relativos a la contratación de los servicios técnicos competentes con formación específica en producción integrada, gastos de análisis agronómicos, trampas y feromonas, así como a gastos de certificación de la producción.
José Manuel Ortiz, en su intervención en el acto, ha valorado el éxito probado de estas ayudas públicas, ya que, según él, «si las frutas y verduras de Almería son hoy lo que son y tienen el prestigio y la aceptación que tienen en los mercados más exigentes -como el alemán-, es por su calidad y por su seguridad alimentaria, unas cualidades labradas a lo largo de los últimos años gracias a la apuesta de los agricultores almerienses, con el apoyo de la Junta de Andalucía, por una agricultura más sana y respetuosa con el medio ambiente”.
En los últimos cinco años, entre los agricultores, la Junta de Andalucía y otras Administraciones públicas, en la provincia de Almería se han invertido más de 120 millones de euros en la extensión de estos métodos de cultivo a la mayor parte de las explotaciones agrarias, inversión de la que en torno a unos 45 millones corresponden a fondos públicos. Esta apuesta es la que ha permitido que de las 800 hectáreas en producción integrada que había en 2006, en la campaña 2011-2012 se hayan superado las 20.000, y que para la campaña actual las previsiones hablen de casi 26.000 hectáreas, más del 90% de la superficie invernada. Un salto cualitativo y cuantitativo, que según Ortiz, “ha supuesto una revolución –‘la revolución verde’-, que ha situado a Almería a la cabeza de Andalucía y de España en el empleo de métodos de control biológico de plagas en sus cultivos”.
El delegado de la Junta ha agradecido a los representantes de las API que sigan trabajando por aumentar la calidad y la seguridad de los cultivos, y los ha animado a hacer un último esfuerzo para conseguir que en la próxima campaña la producción integrada esté implantada en el 100% de las explotaciones protegidas de la provincia.
El tomate, el que más crece
El aumento de la superficie con producción integrada que se prevé para esta campaña se debe principalmente al cultivo de tomate, que de las 3.150 hectáreas en control biológico del ejercicio anterior, pasará a más de 7.300 (un 130% más), prácticamente dos tercios de la superficie dedicada a esta hortaliza en la provincia. Además del tomate, también está previsto que se incremente la superficie de cultivo en control biológico de berenjena (unas 1.220 hectáreas), judía (130), pepino (2.660) y pimiento (7.850 hectáreas). La superficie prevista de calabacín es de unas 870 hectáreas, mientras que la de melón estará en torno a las 3.000 y las de sandía rondará las 2.500 hectáreas.
El incremento de la superficie de tomate cultivada con control biológico en la lucha contra las plagas y las enfermedades supondrá una considerable reducción de los tratamientos con productos fitosanitarios. En la campaña 2011-2012, según datos de la Delegación de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente, las 3.150 hectáreas de tomate en control biológico supusieron un ahorro de 55% en productos fitosanitarios.