El mármol blanco de Macael servirá para que el Patio de los Leones de la Alhambra recupere su imagen histórica y vuelva a ser abierto al público en los próximos meses.
Los trabajos previos a la pavimentación del Patio de los Leones de la Alhambra han comenzado este lunes con la protección de la fuente y las esculturas nazaríes para garantizar su conservación durante la ejecución, que se prolongará durante un plazo de dos meses.
La intervención, a cargo del Servicio de Conservación del Patronato de la Alhambra y el Generalife, conllevará además el corte en el suministro de agua en los leones y la fuente, que serán cubiertos con un sistema de protección diseñado a medida durante la pavimentación, llevada a cabo por Construcciones Otero.
El Patio de los Leones, que volverá a ser accesible al público en los próximos meses, recuperará su imagen histórica, tal y como el sultán Muhammad V lo concibió en el siglo XIV como Casa Real Nazarí, y tal y como fue relatado por los primeros cronistas de la época, como Jerónimo Münzer, que describieron este espacio como un patio solado en mármol blanco.
El estudio de la documentación histórica procedente de diferentes archivos nacionales ha desvelado que el suelo estuvo cubierto a finales del siglo XV con mármol blanco, por lo que la nueva intervención se aproxima a esta imagen también empleada a lo largo de la historia de la conservación del monumento y contribuirá a una mejor preservación del sistema hidráulico de la fuente.
El inicio de los trabajos se produce después de que el pasado mes de enero las doce esculturas de este emblemático enclave de la Alhambra regresaran a su ubicación original y comenzaran a verter agua con un nuevo sistema hidráulico después de su restauración, que se ha prolongado durante cinco años y que ha desvelado importante información para la interpretación artística, histórica y simbólica del conjunto nazarí.
Durante la dominación musulmana, coincidieron durante mucho tiempo, los estilos gótico en Castilla y el arte arábigo-andaluz en la España Musulmana. En esta época, en la que el mármol de la zona de Macael alcanza su máximo esplendor, la arquitectura dominante lo utiliza como el sello de toda una cultura.
De esta época datan las construcciones de la Alhambra y el Generalife, además de innumerables fuentes y palacios de toda Andalucía. Con la conquista de Granada por los Reyes Católicos, se disparó la demanda de mármol y se construyeron una infinidad de iglesias, catedrales, monasterios, palacios, palacetes y obras públicas y privadas realizadas a lo largo del siglo XVI y parte del XVII.