sábado, 20 abril 2024

Jubilación anticipada: cómo influye en el cobro de la pensión pública

30 noviembre 2020
Red
Finanzas

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Se trata de una modalidad que ha crecido mucho en los últimos años, hasta el punto de casi duplicarse desde 2014, según datos de la Seguridad Social, entre otras cosas por la incertidumbre en torno al sistema de pensiones.

La jubilación anticipada es un régimen legal que permite al trabajador retirarse con hasta dos años de antelación con respecto a la que debería ser su edad legal de jubilación. Una modalidad que ha crecido mucho en los últimos años, hasta el punto de casi duplicarse desde 2014, según datos de la Seguridad Social, entre otras cosas por la incertidumbre en torno al sistema de pensiones.

Sin embargo, la jubilación anticipada tiene consecuencias bastante importantes sobre la pensión en forma de una menor cuantía mensual para el trabajador. En la práctica, es una opción que la Seguridad Social pretende desincentivar por completo, haciendo que el trabajador renuncie a una buena parte de su pensión, incluso aunque cumpla el resto de requisitos para jubilarse.

Los coeficientes reductores; así influye la jubilación anticipada sobre la pensión

Los coeficientes reductores son unos porcentajes aplicados sobre la pensión de jubilación que reducen su cuantía en función de cada trimestre o fracción de trimestre que le falte al trabajador para cumplir la edad legal de jubilación y del período de cotización que se acredite.

Los coeficientes reductores se calculan de manera trimestral, y son los siguientes:

  • El 2% trimestral si ha cotizado menos de 38 años y 6 meses.
  • El 1,875% trimestral si el periodo de cotización acreditado es igual o superior a 38 años y 6 meses e inferior a 41 años y 6 meses.
  • El 1,75% trimestral si ha cotizado entre 41 años y 6 meses y 44 años y 6 meses.
  • El 1,625% trimestral cuando se haya cotizado más de 44 años y 6 meses.

Así, por ejemplo, un trabajador que acredite 35 años de cotización y quiera jubilarse con dos años de antelación con respecto a la que debería ser su edad ordinaria (8 trimestres), tendrá que renunciar a un 16% de su pensión. Para un trabajador con una pensión de 1.500 €, la cuantía quedará en 1.260 €.

Alternativas a la reducción de la pensión

La jubilación anticipada se ha convertido en una alternativa interesante para muchos trabajadores que no quieren esperar hasta los 65 años. Sin embargo, el potente recorte que sufren las pensiones de los trabajadores que se acogen a esta modalidad hacen que, en la práctica, sea una opción que está bastante desincentivada.

En cualquier caso, existen alternativas que permiten recuperar parte de la pensión perdida. La más conocida son, sin duda, los planes de pensiones, un instrumento pensado específicamente para la jubilación del trabajador que, además, permite desgravar las aportaciones en la declaración de la renta. A ello se le suman otros productos de renta fija a los que normalmente recurren aquellas personas que se encuentran en una edad próxima a la de su jubilación y quieren preservar su patrimonio sin sobresaltos.

Pero, además de los planes de pensiones y la renta fija, una excelente alternativa para evitar el riesgo son los depósitos a plazo fijo de entidades europeas, con una mayor rentabilidad frente a la que podemos encontrar actualmente en España. Un tipo de producto que, además, se encuentra totalmente garantizado por el fondo de garantía de depósitos del país donde la entidad tenga su sede social y, por tanto, permiten asegurar el capital del pensionista.

En cualquier caso, la decisión de optar por una jubilación anticipada o no debe tomarse de forma lo suficientemente razonada en función de las necesidades y las condiciones en las que quiera jubilarse el trabajador.

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