Los tiempos cambian y ahora lo están haciendo más que nunca. Internet llegó a nuestros hogares y ahora se ha colado en nuestros bolsillos para ofrecernos servicios, productos y soluciones antes impensables. Solo hay que mirar al ámbito de la educación y la formación, campos que han revolucionado por completo.
Y es que ya cada vez es menos necesario tener que acudir a un centro de formación para aprender. Grandes escuelas y universidades de todo el mundo se están lanzando al ámbito de la enseñanza online para permitir que todo aquel interesado en mejorar académica y profesionalmente pueda hacerlo sin salir de casa.
Un sistema que se apoya por completo en las nuevas tecnologías y que tiene en centros como el de escueladenegociosydireccion.com algunos de sus máximos exponentes. Este caso, el de ENyD, está llamando bastante la atención porque está ofreciendo másteres en Marketing Digital o en Dirección y Gestión de Empresas con una metodología online de gran calidad.
¿Qué tiene de nuevo su planteamiento? Que además de abrir la puerta de la formación online para títulos superiores, está dibujando un sistema educativo diferente y más eficiente, pero sobre todo más flexible. Precisamente esta escuela está destacando porque su oferta educativa es de calidad, con buenos profesores y con métodos de enseñanza más dinámicos.
En definitiva, está demostrando que estudiar a distancia no solo es posible, sino que ahora es mejor y más fácil que nunca. La tecnología ha evolucionado muchísimo, y nos permite lanzarnos a por ese máster que siempre quisimos sin tener que pasar por aulas ni por complicadas restricciones horarias.
Una alternativa que aumenta sin parar
Poco a poco aumenta el número de estudiantes que opta por la formación online. El crecimiento de este tipo de alumnos se disparó durante el pasado 2020, aunque en aquellos meses la clave de este boom fue el confinamiento, que disparó el interés por la formación online, aumentando el número de matriculaciones.
Los centros más importantes del país registraron uno de sus mayores aumentos en las solicitudes para estudiar online. Y lo cierto es que es un fenómeno completamente lógico. La pandemia ha puesto en evidencia muchos sistemas tradicionales, obligando a buscar nuevas alternativas para tratar de mantener la normalidad. La educación, de hecho, es uno de los sectores que más se ha visto afectado, ya que concentrar personas en aulas no es algo recomendable.
A esto hay que sumar restricciones de desplazamientos, restricciones de horarios y pérdida de poder adquisitivo en muchos hogares por culpa de los despidos y los problemas de los ERTE. Todo esto ha provocado que cambien muchas cosas en nuestro día a día, dejando una huella en el sector de la educación.
Frente a todo esto, la formación online se ha posicionado como la mejor forma de aprender. Los alumnos no tienen por qué salir de casa, solo necesitan internet y su ordenador para poder estudiar. Acuden a clases virtuales, obtienen toneladas de material para estudiar e incluso pueden disfrutar de otros métodos de enseñanza más dinámicos y eficientes.
La propuesta ha ido ganando terreno porque encaja perfectamente con el contexto social actual, y al mismo tiempo está ofreciendo soluciones para ambas partes. Los docentes pueden seguir desarrollando su labor de forma más segura; los alumnos pueden acceder a más ofertas de estudio y titulaciones y sin preocuparse por localización.
Generalmente, estudiar un máster online suele salir más barato que estudiarlo presencialmente. Puede que la barrera del precio de matriculación haga pensar lo contrario, pero se evitan cuestiones como el pago por desplazamiento, cualquier gasto de vivienda en caso de tener que mudarse y un largo etcétera de euros que acaban llevando al ahorro.
Por todo esto es por lo que crecen el interés y la demanda. Grandes másteres en grandes centros se abren frente a todos los estudiantes que tienen internet y ganas de aprender. Bien es cierto que el sistema plantea ciertas barreras, como la necesidad de contar con una buena conexión o la responsabilidad de llevar un buen ritmo de estudio. Pero está demostrando que vale la pena.
Cualquiera puede estudiar un máster online actualmente. Ahora queda por ver si acaba convirtiéndose en un nuevo estándar o simplemente pasa a ser algo pasajero, potenciado por la pandemia. Desde luego, muchas más personas lo han descubierto este año y han visto cómo se pueden obtener titulaciones de postgrado perfectamente válidas y de calidad.
Se derriban muros de prejuicios a la vez que aumenta la necesidad, es la combinación más importante que ha propulsado esta forma de estudiar y de aprender. Cualquier universitario, cualquier trabajador, cualquier persona puede dar el paso y estudiar aquello que siempre quiso desde la comodidad del hogar.
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