Llegó el momento del adiós, ya con las matemáticas en la mano, en el caso de derrota ante el equipo revelación de la temporada. Si se pierde ante el Alcorcón y ganan Córdoba (en el campo del Girona) y Hércules (en Las Palmas), únicamente quedará el golaverage particular a favor en caso de un empate a puntos altamente improbable con el equipo de la ciudad de los califas (9 sobre 9 en juego). Sin embargo todo puede suceder todavía, y es cuestión de como se sea capaz de ver el vaso. Pero eso sí, hay que reconocer que pensar en que está medio lleno es muy complicado después de las dos dolorosas derrotas sufridas y de no encontrar comodidad en ninguna faceta del juego.
El Almería se ha puesto a opositar y va con paso firme para conseguir la plaza de peor equipo de la segunda vuelta, mientras que el conjunto ‘alfarero’ ha tomado otro paso inexorable hacia arriba que lo aloja por el momento en la cuarta posición de la tabla. Por ello, y más que nunca, se trata de un cruce no tanto de rachas sino de sensaciones, del salir todo bien frente al salir todo mal, del no contar y estar ahí y del contar y no estar ahí. Anímicamente la escuadra de Esteban Vigo anda ya casi hundida, y se corre el peligro de que cada cual haga la guerra por su lado, lo que el míster intentará evitar a toda costa. Ya no se confía en nada y en nadie, aunque el ‘Boquerón’ insista en que su sistema es el mejor y que tiene equipo para desarrollarlo.
Y eso que lo de tener equipo es más bien un poner. Hasta once se eleva al cuenta de jugadores de campo disponibles con dos porteros, por lo que la convocatoria se ha completado con cinco futbolistas del filial. Así las cosas, de los que sí estarán en el campo tampoco es que se pueda decir que andan muy boyantes, con el paradigma de nada más y nada menos que el pichichi de la categoría, todo un Leo Ulloa, sin encontrar el sitio ni la situación. Vigo ha confesado que no se entienden, y los hechos se resumen en dos goles del argentino, uno de ellos de penalti, desde la llegada del malagueño como inquilino del banquillo rojiblanco. Podría tener su oportunidad Ortiz Bernal, que ha contado un ratito los dos últimos choques, y quizá eso suavice a una grada que será una incógnita hacia los jugadores, el cuerpo técnico y el palco.
La defensa se montará con dos centrales zurdos y la reserva de Lillo y Trujillo, el triángulo de mediocampo no sufrirá a buen seguro ninguna variación, pero la baja de Vidal por sanción hay que cubrirla con Ortiz o con Jonathan, contando con que Aarón irá a la otra banda, sea la que sea. Sin Carlos García en el eje de la defensa el equipo puede resentirse de galones, pero es mejor que se vaya acostumbrando porque por supuesto menosprecio al árbitro se le han sumado dos partidos más al de sanción por acumulación de tarjetas. El barcelonés volvería sólo para el último partido del campeonato, en casa y ante el Alcoyano, posiblemente con el pescado vendido muy barato. Pero así de corta es la plantilla y no es nada nuevo ni de hace dos jornadas, sino que se viene consumando desde hace bastantes más.
Por su parte, el Alcorcón viaja feliz sabedor de que tiene la sartén por el mango y que son los demás los que tienen que ir a buscarle a él, sin necesidad de tirarse al monte. Tras haber eliminado al Real Madrid de la Copa del Rey se empezó a escribir una leyenda que puede culminarse con la llegada a Primera División, y por ello serán un rival muy duro de discutir. Los madrileños son buenos visitantes, con 25 puntos en su haber a domicilio, pero en su última salida encajaron un duro 3-0 ante el Celta. Para añadir complicaciones, es el tercer equipo menos goleado, con 38 tantos encajados, lo que no invita al optimismo porque el Almería no ve puerta ni con una decena de llegadas claras a la portería rival. Por último, en el capítulo de efectivos también están mejo, ya que el míster Anquela recupera a Agus y se toma la licencia de darle descanso a Manuel Rueda en el carril izquierdo.
Para cerrar, y a la espera de que la UDA eleve mucho su rendimiento, una cuestión sin medición ninguna posible será la actitud del público en la grada. Se repite una vez más el famoso 2×1, que siempre ha fracasado todas las veces que se ha ofrecido a los abonados. El respetable es precisamente eso, respetable, y lo es por algo, así que si se decide presentar quejas el destinatario de las mismas las debería de asumir sea cual sea su puesto en el escalafón rojiblanco. Pero lo apetecible sería un San Mamés, que anime durante 90 minutos a morir, y que si es necesario que se pronuncie una vez todo haya concluido. Hay posibilidad de seguir con vida, y esa posibilidad, aunque sea únicamente esa, sí que está en las manos tintadas con los colores almerienses. Dignidad, orgullo y valentía. Sólo eso.
Árbitro JUAN MARTÍNEZ MUNUERA
Cuarto árbitro MARIANO MEDINA MÉNDEZ
Árbitro asistente 1 DAVID CANALES CERDÁ
Árbitro asistente 2 SERGIO CHINCHILLA ORTEGA
Delegado informador BIBIANO JESÚS JIMÉNEZ HIDALGO