Los plazos siempre son indicativos y casi nunca exactos, pero menos lo son si hay un maño de por medio. Fuera de tópicos estereotipados sobre las regiones de España y sus oriundos, Fernando Soriano es un jugador extraordinario que da la sensación de que podría estar sobre un terreno de juego hasta que cumpla los cien años, jugando queremos decir, porque con el papel de entrenador seguramente estará otros cien. Su honestidad lo lleva en volandas siempre, y a profesional no hay quien le gane.
Por ello, es encomiable el esfuerzo individual que está realizando para volver a estar con sus compañeros sobre el campo, sufriendo de una manera distinta a como lo está haciendo ahora, ya que a buen seguro le estará invadiendo la impotencia de no poder hacer nada para ayudar a su UD Almería. Él sigue a lo suyo y continúa con la recuperación de la lesión de rodilla que sufrió el pasado 31 de marzo en el partido frente al Xerez, disputado en el Mediterráneo. Al día siguiente, domingo, se le vio por las instalaciones del estadio con prisa ya para conocer el alcance real de su dolencia y empezar cuanto antes a recuperar.
Pero fue dos días después, el lunes, cuando la resonancia que se le practicó determinó que lo que le pasaba a su rodilla derecha era un esguince en el ligamento lateral interno, y que el plazo para volver a jugar un partido se estimaba en unas seis semanas. Ya se han consumido algo más de dos y Soriano va evolucionando de manera positiva porque así lo está buscando con el desarrollo del programa y el tratamiento que le dispensó en su momento el equipo médico. El seguimiento por parte del mismo es continuo, está claro, pero el que puede poner todo de su parte o sólo una porción es el jugador.
Es cierto que no hay mucho margen de mejora del plazo previamente establecido, pero con todo y con ello, marchando todo bien como parece que va hasta el momento, se podría acortar ligeramente. Sería realmente importante para el Almería, puesto que con que llegue un partido antes de cuando se lo espera, contando con lo poco que va restando de campeonato, será una gran noticia para Esteban, para la afición y también, como no, para él mismo. Su esfuerzo en el gimnasio para no perder musculatura y las manos expertas del equipo de fisioterapeutas del club están resultando determinantes, como es lógico.
La web de la UDA (www.udalmeriasad.com), comenta literalmente que «el centrocampista del conjunto almeriense se «machaca» ya en doble sesión porque está deseando poderle ser útil al equipo y estar con sus compañeros en los momentos claves de la temporada. Tiene buenas sensaciones y poco a poco irá evolucionando en la rehabilitación». Y para definir lo duro de esta parte del trabajo hace un símil con el ciclismo al afirmar que está a punto de coronar un puerto de montaña, después del cual todo será un poco más llevadero y esperemos que rápido. Ya son 18 días, un poco menos de la mitad prescrita, sin Fernando Soriano y se le echa en falta.