Todavía con la sangre caliente después de haber vivido desde el peor sitio posible -desde el palco- un gran partido en el que su equipo de jugaba todo, sin posibilidad de dar rienda suelta a sus sentimientos ni de tan siquiera gesticular mínimamente tras una jugada positiva, una decisión arbitral errónea o un error de los habituales de su Unicaja, Ramón Sedeño se sinceró a pie de cancha, y pasando de soslayo por lo sucedido en el partido adelantó algún aspecto interesante de lo que será la temporada venidera vestida de blanquiverde.
La piedra angular sobre la que se construirá el futuro equipo campeón puede tener más de un nombre, pero hay uno que pulula en la mente de todos, y que no está en la mano de nadie, salvo de la suya. Se llama Piero Molducci, el elegido y el ideal para forjar campeones donde actualmente hay únicamente aspirantes con capacidad para serlo. Sedeño lo reconocía taxativamente: «Piero es mi amigo, es amigo del club, y es amigo de Almería, por lo tanto, con él podemos hablar en cualquier momento y con toda la seriedad del mundo, lo que pasa es hoy Piero no está para hablar de absolutamente nada; pero pronto hablaremos con él, una vez que tengamos despejadas las dudas para la temporada que viene; será el primero con el que hablemos porque para mi personalmente, lo tengo que decir así, sería una gran ilusión que Piero, el año que viene, entrenara a este grupo de jóvenes, porque es lo único que necesitan, un entrenador que los haga jugadores en muy poco tiempo, y estoy convencido de que Piero lo puede hacer».
De hecho, la progresión de los jóvenes de Unicaja ha sido extraordinaria desde la llegada hace algo más de un mes del técnico transalpino, llegando a doblegar al mejor equipo de la competición según todos los entendidos, como ha sido CMA de Soria, y a discutir casi todos los sets en disputa de la gran final ante el solvente Caja 3 Teruel: «para mi, empezando desde Toni Llabrés, que ha crecido enormemente a lo largo de la temporada, y ha demostrado en los momentos más difíciles, que son la semifinal y la final, que es el líbero en el que nosotros teníamos plena confianza; estamos muy satisfechos con Borja Ruiz, que es un jugador que va a ser uno de los mejores centrales de la historia del voleibol español con toda seguridad, porque es un jugador que se va a cuidar y que va a crecer muchísimo más de lo que ha crecido; y lógicamente que con Calos Baos o Almansa estoy convencido de que con los juveniles y con los juniors lo dieron todo y aquí no han tenido las suficientes oportunidades, o el propio Ignacio, que son jugadores que necesitan continuidad, que necesitan entrenar al máximo nivel y aunque no hayan jugado, al nivel que han entrenado este año y se les ha notado una barbaridad la mano de Piero».
Habrá, como es lógico, varias salidas, como las de los jugadores que agotan contrato, a no ser que se alcance algún acuerdo satisfactorio con alguno de ellos cuando se planifique la temporada venidera. Todo depende de la economía, que anda un tanto delicada, como todo el mundo sabe. La lista la da el propio presidente ahorrador: «no tienen contrato en estos momentos, que yo sepa, Gustavo Delgado, Ibán Pérez y Alberto Salas; llegará el momento en el que hagamos el replanteamiento y vayamos viendo cómo va a ser la temporada que viene; son tiempos muy difíciles, y lógicamente entonces, eso económicamente primero tenemos que ver cómo afrontamos la temporada para luego hablar de composición del equipo; de todos modos no vamos a salirnos de nuestra línea, la que hemos tenido este año, lo tenemos muy claro, y para el año que viene vendrá algún jugador más joven».
Y es que este año ha dado resultado, alcanzando mucho más de lo exigido a nivel de club y peleando una gran final a un equipo hecho con talonario por delante: «todavía no me lo creo; ya lo dije al principio de la temporada, lo he dicho en la presentación de todos y cada uno de los momentos importantes, y era que nosotros queríamos estar en los playoffs por la Copa, en los playfoffs por el título, y hemos estado». Con respecto a lo sucedido en la final, incluso se podía haber sido un poco más ambicioso, teniendo en cuenta que el equipo ha estado tocado: «bueno, son gajes del deporte, no es culpa de nadie, pero la hemos tenido que jugar con dos jugadores mermados, que eso lógicamente para nosotros nos ha debilitado, que han sido Gustavo Delgado, que no pudo jugar ni el quinto partido en Soria ni los dos partidos de Teruel, y no es justificar, y Menzel, que ha venido de Torrecárdenas a ponerse la camiseta, con una gastroenteritis con la que lleva desde el miércoles, y tuvo que suspender el entrenamiento porque no podía; esas son circunstancias que te llegan en unos momentos determinados y que no las puedes evitar, no las prevee nadie»
Además de esto, y en el capítulo de la crítica, que también la ha habido, Ramón Sedeño ha dejado caer que se ha notado que algún jugador no ha estado el nivel esperado, y no por lesión precisamente: «lógicamente, este equipo debe jugar al cien por cien y algún jugador no ha jugado al cien por cien». Con la elegancia de no decir el nombre del o de los señalados según su criterio, no ha querido hablar más al respecto, ni recordar al Sevillano de Unicaja en la pasada final también ante Teruel, equipo en el que finalmente recaló: «no quiero hablar; a mi los ‘sevillanos’ me gustan para ir a la feria, no me gustan para nada más». En todo caso, y teniendo en cuenta la cuna de Mario Ferrera, natural de Los Palacios, provincia de Sevilla, y hombre que la pasada compaña tuvo que suplir en Los Planos al catalán de Reus y que lo hizo francamente bien, no ha querido ningún malentendido, dejando claro el juego de palabras con el apellido del receptor de Caja 3 Voleibol Teruel, que nada tiene que ver con el respeto a los oriundos de la capital andaluza: «Mario lleva tantos años en Almería que yo creo que desde que era niño no ve la feria de Sevilla -en tono jocoso-, además a él le gusta la feria de Almería».
En todo caso, no ha querido ir más allá sobre los que no han dado el nivel oportuno sin ningún tipo de motivo, y a lo que se limitó nada más terminar el choque fue a saludar a todos y cada uno de los jugadores de su escuadra y a darles las gracias por una temporada completa en la que han dado más de lo que se les había exigido: «no quiero decir quién no ha dado el nivel, y a los jugadores yo les he dado las gracias al terminar el partido uno a uno a todos, porque creo, y también se lo he dado al cuerpo técnico, y se las he dado a Piero, que este año, aunque hayamos sido subcampeones, se merecián las gracias desde las semifinales».
El Unicaja del futuro, del mañana como titulábamos desde www.almeria360.com ayer, ya está en marcha, con más incógnitas que las desveladas por parte de su máximo dirigente del club más laureado del voleibol nacional al que, eso sí, se le resiste desde hace demasiado tiempo la novena Superliga. Pero está claro que hasta que algún equipo pueda alcanzarle deben pasar muchas temporadas, suficientes como para que las aguas vuelvan a su cauce y se consiga rozar y alcanzar la decena de entorchados ligueros. Si se consigue será porque la filosofía canterana dará sus frutos: «el mejor jugador de Unicaja a día de hoy es Andrés Villena -en la permanente junenil y mejor anotador del mundial en esa misma categoría-«.
