El zaguero de la UD Almería ha dejado huella en el público, en la ciudad y en la liga española, tanto en Primera como en Segunda División, y aunque todavía le queda un partido vestido de rojiblanco el que disputó ante el Numancia fue el último en ‘su casa’. Ha definido siempre a esta provincia como ‘el paraíso’ cada vez que ha hablado sobre ella, y eso sin tener ningún micrófono de por medio, ante los que se habla para quedar bien. En el vestuario ha sido buen compañero, un tipo sencillo y servicial. En la cancha de juego ha ido siempre a cuidar el aspecto solidario con la pareja de baile que tuviera al lado en el centro de la defensa, aunque si se le ha pedido también ha tapado la banda izquierda. En ataque, muchos goles y varios de ellos importantes. No es el más rápido, pero su colocación ha sido siempre su gran ventaja. Sabe jugar al fútbol.
En la zona mixta del Mediterráneo, del que se despidió a lo grande marcando el primero de su equipo, se mostró muy feliz por el partido cuajado y por la manera de la despedida: «muy contento porque es verdad que se ha hecho lo que había que hacer». Su papel fue estelar en un choque especial: «me tocó marcar, tuve ocasiones, varios remates de cabeza y eso poco a poco te va levantando y dando más confianza todavía, te da más tranquilidad y hace que estés más pendiente de tus compañeros, ayudándolos; esto es así». Su trayectoria habla de importantes goles en las luchas por el ascenso, como uno que marcó en Gijón en 2007 y éste ante el Numancia, con brindis incluido al público:»la verdad es que la afición, en las buenas y en las malas, siempre ha estado conmigo y eso siempre hay que agradecérselo a ellos; si no fuera por ellos yo creo que todos aquí no estaríamos tan contentos».
En todo caso, no quiso confirmar que su marcha del Almería es definitiva, al asegurar que «realmente es verdad que he cumplido ocho años; son muchos años aquí y estoy muy contento, muy agradecido; hemos pasado un buen momento aquí y malos también, pero no lo sé; vamos a esperar, pero de todas maneras tendré que regresar aqui». Su marcha se produce por una llamada de la selección peruana, pero cree que volverá para el play off: «lo merecemos, el equipo está muy bien y vamos a seguir nosotros intentando ganar los demás partidos para ver si terminamos bien ese deseo de estar en el play off y después miraremos cómo afrontamos eso». En ese sentido, lo siguiente es Guadalajara, donde Santiago sí estará: «en ese partido nosotros nos jugamos mucho y esperemos que todo salga bien y tratar de esforzarnos al máximo porque va a ser un equipo que en casa está demostrando que ha crecido en los últimos partidos».
Por último, se apunta Acasiete a la teoría del míster de que si se ganan los partidos que quedan se va al play off seguro: «hay que ser realistas, pensamos en otros equipos a los que les puede pasar algo; si nosotros nos mantenemos sí que podemos estar cerca del play off; de todas formas, hay que esperar, ganar los partidos, quedan dos y vamos a hacer lo mejor para eso». Y toca también ser del Valladolid y el Celta para que lleguen a la última jornada con opciones de ascenso directo y así asegurar que pongan mucha intensidad, sobre todo el Celta, que recibe al Córdoba: «está claro que nosotros pensamos también en ello».
