Tener derecho a jugar directamente las semifinales de la Copa del Rey. Ese es el objetivo sin tapujos que pone el italiano, sabedor de que no es pedir mucho a un equipo que sigue creciendo, que está tomando tiempo y cuerpo y que tendrá preparado para cuando lleguen los momentos álgidos. Eso sí, en esa progresión está obligado hacer un test de gran exigencia, puesto que para ese subcampeonato de invierno es obligado vencer a Vecindario: » es un equipo que juega bien, tiene un buen estar en el campo, es experto y difícil de jugar; recibe bien, tiene un cambio de saque buenísimo, un colocador bueno –Daniel Castañeda-, por lo que tiene un buenísimo juego».
En el análisis canarión también caben los puntos débiles: «lo peor que tiene creo que es el bloqueo, pero es un equipo difícil». El de Sánchez Jover apura además sus opciones de ser segundo, más aún cuando será el último encuentro que disputen hasta 2014 porque llevan uno más disputado: «irá a apurar sus opciones para conseguir la segunda plaza; es un equipo que siempre que juega lo hace bien, no suele jugar mal y entonces es cómo juguemos nosotros, hay que hacerlo al cien por cien ya que al ochenta por ciento se pierde». Lo tiene claro un Molducci que comprende que es el momento de poner en práctica el avance del juego blanquiverde.
La clave para superar a los canarios será la actitud con la que se salga a la pista de juego: «la concentración es siempre importante, pero para este partido más porque Vecindario tiene un juego difícil y esta semana hemos entrenado muchísimo como juegan ellos, por lo que miraremos cómo va; la semana ha ido normal, con entrenamiento normal». Eso último es de agradecer esta temporada, ya que lo habitual ha sido que las cosas no sean como deben. Con todo, se está en la lucha: «la segunda plaza va a ser difícil porque si nosotros le ganamos a Vecindario pero perdemos contra Teruel la segunda plaza va para Ibiza, si ganamos los dos somos nosotros segundos y si perdemos los dos seremos cuartos o quintos, así que no lo sé».
Todo está muy abierto, así que al final lo que le importa es que la plantilla vaya cogiendo ritmo competitivo y creciendo para llegar a obtener el título: «la Copa del Rey la tenemos, y para ganarla hace falta ganar todos los partidos, no hay que calcular nada porque si no ganas estás fuera, por lo que da lo mismo jugar dos que tres partidos». Asume con corrección política eso del trasiego por la provincia, animando a que el público de Carboneras eche una mano: » no conozco el pabellón, el pueblo un poco; pienso que la política de jugar fuera en un pueblo cercano a la ciudad es importante para promocionar el voley y Carboneras no ha tenido nunca un equipo de voleibol, por lo que puede venir a disfrutar del partido».