Es malo entrar en el once por la lesión de un compañero, pero el lateral diestro o zurdo, según se le pida, sabe que tiene que aprovechar su ocasión. A pesar de que no juega demasiado, se sintió bien en Alicante, en donde el Hércules insistía en los pases a la espalda de la defensa. Considera que para estar muy tranquilos se debe vencer a Las Palmas, y así guardar la parte mental a buen recaudo, como él mismo hace cuando se pasa varias jornadas sin participar en el juego. Es de su gusto subir y participar en el ataque, tal y como se le plantea a los laterales rojiblancos por parte del técnico Javi Gracia. Le es igual jugar con sudamericanos en la defensa, si bien es cierto que tiene una fantástica relación con Marcelo Silva por aquello de compartir nacionalidad, al igual que Sebas Iriarte, que milita en el filial y que cada día que pasa se hace más importante.
