El míster del filial ha querido recordar el semana tan complicada que ha pasado, entrenando sólo con siete futbolistas por las necesidades que ha tenido el primero equipo rojiblanco. Además, la convocatoria se ha visto muy alterada por las bajas, pero asume su papel de estar al servicio del equipo de Liga Adelante y confía en la calidad de los juveniles. Según su criterio, merecen una oportunidad aunque sea complicado competir en una categoría tan difícil como es la Segunda División B. Son jóvenes, algunos con 16 años como el caso de Dani Romera, pero su progresión seguirá con el filial porque Francisco no pide fichajes. El entrenador vio el encuentro desde un palco al estar sancionado, por lo que pidió disculpas a sus hombres, pero desde allí ordenó los cambios oportunos para darle vida cuando peor lo pasaba el filial.
El entrenador serón no dudo en echar mano de la diosa fortuna, que ha abandonado a su equipo de una manera muy clara, para explicar lo sucedido sobre el césped del Estadio de los Juegos Mediterráneos. Esa mala suerte propia junto a la eficacia local, a la que no le quiso restar también la parte de talento que entiende que tienen los jugadores rojiblancos, les privó de haber puntuado. Entiende justa la expulsión que sufrió su equipo, pero no comparte la anulación del que habría sido el empate a dos todavía con igualdad numérica en el terreno de juego. Del Almería B dijo que se notaron sus ausencias, considerando que era mejor equipo en la primera vuelta. Sobre los suyos, elogia el carácter de no perderle la cara al partido en ningún momento, incluso ya estando con uno menos.