Se anunció y acto seguido se ha hecho efectivo. La denominación del entrenador rojiblanco como el más destacado de entre todos los inquilinos de los banquillos de Primera se ha producido justo cuando su equipo está en la encrucijada de retomar el triunfo tras haber perdido sus dos últimos partidos en liga, pero se le ha contado sobre todo la reacción que el Almería experimentó para salir incluso de descenso. También pesa a la hora de esa designación el conocimiento general de que cuenta con una de las plantillas más pobres de toda la categoría, y de entrenar a un Segunda B ha pasado a ser el mejor de la Liga BBVA en apenas medio año.
Se trata de un premio de nuevo cuño que la LFP ha instaurado esta temporada, unido al de mejor jugador de cada mes. Se da la circunstancia de que ese ha sido Cristiano Ronaldo, por lo que el compañero del zapillero en la foto de los mejores de la clase no podría ser de más alto nivel. En cuanto a Segunda, los reconocidos han sido Gaizka Garitano, técnico de Éibar, y Borja Viguera, delantero del Alavés. El mes de noviembre ha sido talismán para él, completando una serie de tres triunfos consecutivos cuando todavía no se había ganado ningún partido. Sus palabras han sido las de siempre, con sencillez: «no concibo un premio individual en un deporte colectivo», haciéndolo extensivo a la plantilla y a todos los integrantes del cuadro técnico. «Este es un deporte de equipo».
El galardón ya le ha sido entregado, una vez concluida la sesión preparatoria del miércoles. Andrés Rascón, director de Centro de Banca Comercial del BBVA en Almería, acompañado por Cristina Sánchez, de la LFP, ha sido el encargado de hacer entrega del mismo al entrenador de la UD Almería en un acto celebrado sobre el césped del Mediterráneo con la presencia, además, de los consejeros Luis Guillén y Jesús Verdejo. En el acto el técnico almeriense reconocía sentirse «muy satisfecho y orgulloso de este galardón» y quiso darle las gracias «tanto al BBVA como a la Liga de Fútbol Profesional».
En un tono no de codicia sino de optimismo, Francisco ha reconocido que espera recibir algún premio más «porque ello significará que el equipo lo está haciendo bien». En cuanto a sus antecesores, en septiembre el mejor entrenador de la Liga BBVA fue Marcelino, del Villarreal, y en octubre lo fue Diego Pablo Simeone, del Atlético de Madrid. Ahora Francisco es el que recoge el testigo.
