El equipo del Bajo Andarax es muy duro, dicho esto en el buen sentido de la palabra. La expresión se refiere a que va a ser muy complicado ganarle si sigue haciendo gala de la gran disciplina y compromiso que lo han catapultado hasta las primeras posiciones de su grupo siendo un recién llegado a la categoría. No se prodiga dando patadas ni mucho menos, pero defiende ordenadamente y es un martillo arriba, sacando tajada a los balones que fabrica como ocasiones de gol.
En Níjar la historia no iba a ser distinta, pero a esto se añadió que el Comarca no ha comenzado a carburar y que los de Víctor Mañas no hacen daño a sus rivales en ninguna línea de juego. Sólo la hizo falta la cuadro de Fran un cuarto de partido para dejar el derby solventado a su favor, con dos goles en 23 minutos de juego. El primero fue obra de Álvaro en el 6 aprovechando un desajuste defensivo nijareño, y el segundo una obra maestra del canterano Rubén, colocando el esférico con una gran maestría en el lanzamiento de una falta innecesaria al borde del área. Desde ese momento y con dos goles de colchón, al Huércal es casi imposible levantarle los puntos.
Los blanquiverdes estuvieron muy cómodos durante todo el choque, cambiando los papales al veterano en la categoría y haciendo suponer que no eran los novatos en este grupo noveno de la Tercera División. No es nuevo esta temporada que el Comarca tenga problemas para llegar y generar peligro, pero además tenían frente a si a una de las escuadras que mejor sabe tejer una auténtica tela de araña en torno a la meta defendida por Carles. De este guisa, la segunda mitad fue sencilla para un Huércal agazapado y sin sufrir porque los locales no conseguían abrir sus líneas con criterio y a pesar de volcarse no tenían pegada alguna.
Lo preocupante para los levantinos es no haber sumado ni un sólo punto en cuatro partidos disputados, todos ellos, por tanto, perdidos. Únicamente ha marcado dos goles mientras que por contra a encajado once, y su próximo partido parece idóneo para agarrarse a la buena senda. Se miden al Ronda, que suma tres puntos y que, por tanto, está a tiro de piedra. Es de esperar que se produzca una mejoría en las prestaciones de una plantilla no pensada precisamente para sufrir tanto. Por su parte, el Huércal recibe al Huétor-Tájar en el Municipal, en el que ganaron el primer partido y empataron el segundo ante el que sigue siendo líder del grupo, el Mancha Real, al que tuvieron contra las cuerdas hasta el último suspiro.