El Almería ha fichado al único entrenador de la historia que ha conseguido dos ascensos de forma consecutiva, con Xerez y Hércules concretamente, y sobre el que hay una biografía escrita que se llama «El ganador». Está educado en la filosofía del Barça y ha trabajado en su cantera. Ya sólo con esas credenciales tiene una tarjeta de visita muy interesante. Él es conocido futbolísticamente como ‘Boquerón Esteban Vélez’ y de entrada, como no le cabía otra, ha asumido el reto de mejorar la quinta plaza en la que coge al equipo.
Tras haber desarrollado su primer entrenamiento con un plantilla que asegura conocer por haber visto varios partidos de los que ha disputado esta temporada, ha sido presentado en sala de prensa ante un buen número de medios de comunicación y parte de las cincuentas personas que aproximadamente han presenciado su primera sesión preparatoria sobre el césped del Estadio de los Juegos Mediterráneos. El nuevo míster se ha mostrado contento de haber venido de nuevo a nuestra provincia, lugar en el que inició su andadura como entrenador dirigiendo al Almería CF. La explicación a por qué ha fichado es muy sencilla: «me da posibilidad de poder conseguir un ascenso y aceptar este reto tan bonito y tan deseado por cualquier entrenador de los que estamos en el paro».
Además, confía en poder alcanzarlo porque hay equipo suficiente: «la plantilla la conocía porque venía siguiéndola a lo largo de toda esta temporada, como a toda la segunda división; conocerla es un buen punto de apoyo hacia mí como entrenador, saber que a pesar de que es un poco corta, también es buena». La calidad de los rojiblancos está contrastada también con la situación clasificatoria actual: «estamos ahí metidos, y lo que tenemos que hacer en lo que queda de campeonato, quedan 33 puntos todavía, es mejorar donde estamos; ese es mi reto personal y así se lo he expuesto a los jugadores en el rato que he charlado con ellos cuando he sido presentado».
En el caso concreto del actual Almería y Esteban Vigo y su sistema o manera de entender el fútbol, «se da la circunstancia de que se adaptan perfectamente, lo que no sé es en el tiempo; espero que sea en el mínimo posible y así se lo he expresado a ellos mismos, que tienen que intentar colaborar en todo lo que nosotros vamos a pantear en los entrenamientos, porque lo que sí es verdad que es en este mundo cada entrenador tiene un estilo de juego, una forma de jugar, y yo tengo un estilo que quiero llevar a cabo en un equipo que creo que me puede dar esa posibilidad». Tampoco tiene ninguna duda de que sus hombres van a hacer lo necesario para que sea así, porque ya ha podido comprobar el grado implicación de todos en el entrenamiento: «estoy convencido de que me la van a dar porque los he visto con una predisposicón al trabajo no sólo hoy sino la que vienen haciendo durante toda la temporada».
Para Esteban, se ha venido a cruzar con un vestuario «fantástico, con ilusión, con ganas, porque no me podeís decir a qué jugador profesional no le gustaría conseguir un ascenso; todos mejoramos, ellos en el aspecto futbolístico, nosotros en el aspecto técnico como entrenadores y la ciudad porque vuelve a ser de primera»; esa es la ilusión de todos. Pero no hay que olvidar que en la Segunda División se depende de muchas cosas, «como que el equipo no caiga en lesiones de larga duración» -como la de Soriana ahora-, y a partir de ahí a por todas: «yo he cogido al equipo en una situación que es quinto, y mi obligación es mejorarla y eso quiere decir que podemos quedar cuartos, terceros o segundos; hay puntos suficientes y no te voy a decir que no».
Lejos de presiones, ha reconocido que desde que ha firmado no le han puesto «una pistola en la cabeza para decirme ‘tienes que ascender; yo soy positivo porque el reto es muy bonito, que a cualquier entrenador le habría encantado estar sentado donde yo estoy ahora, pero me ha venido a mi y lo he aceptado con esas ganas que tengo de que este equipo vuelva a entrar por la senda de los triunfos como ha venido haciendo y vamos a pelear por todo, porque hay puntos para pelear por todo, aunque también dependemos de los rivales, si nos dejan o no nos dejan».
Lo que está claro es que la situación de cese de Alcaraz ha sido poco habitual, puesto que «el equipo no está en descenso, el equipo no está en al mitad de la tabla, el equipo está peleando por ascender, por jugar una liguilla de ascenso, y fijaos la cantidad de equipos que se van a quedar fuera». Por ello, no le han dolido prendas en reconocer la labor de su antecesor: «el trabajo está ahí, y yo tengo que aprovecharme de ese trabajo e intentar mejorarlo, y para ello necesito el apoyo de todos ellos, para intentar mejorar la posición y si es posible llegar al ascenso directo; es difícil pero no imposible». Eso sí, no ha valorado la decisión del consejo de prescindir del granadino: «llevo mucho tiempo en el mundo del fútbol y creo que fue Radomir Actic al que echaron cuando iba primero, esto sorprende pero esto es fútbol». Como él mismo ha recordado, «a partir de ahora es Esteban, no hay nada más».
Del equipo previsto, compuesto por un segundo, un preparador de porteros y un preparador físico, el único que no vendrá finalmente será este último, José Manuel Ortega, mientras que Antonio Méndez, su ayudante, llegará la próxima semana cuando resuelva un asunto personal grave. El único que ya se ha personado en Almería es González, guardameta que paro el penalti famoso de Djukic cuando el Deportivo perdió la liga a favor del Barcelona. El exvalencianista hará tándem con Ángel Férez en la faceta de entretanimiento de los porteros. Y de psicólogo nada: «no hay mejor psicología que vuelvan los resultados, y eso es lo que saben los jugadores».
Ya hubo un acercamiento serio antes del comienzo de la temporada para que Esteban Vigo entrenase a esta UDA, pero no fructificó el contacto entre el club y la persona que lo representa, según explica él mismo: «no encajaba en ese momento pero no era por un motivo deportivo o un tema económico, sino que tuvieron una conversación como seguramente tuvieron otras con otros técnicos y llegarían a la conclusión de que la mejor forma que había de encarar el inicio del campeonato era con el entrenador que ha sido cesado hoy; no ha cambiado nada más».
Pero su momento llega ahora, dos días antes de un partido muy complicado en Huesca, por el rival y por las dos bajas que tiene de entrada, Soriano y Corona, además de por el poco tiempo del que va a disfrutar para introducir variantes de juego entre sus nuevos hombres: «eso lo tenéis que entender; yo no puedo venir hoy e intentar que el sábado sea todo perfecto; os lo digo porque probablemente vamos a perder partidos, a mi no me gustaría perder, pero espero que el del sábado no se pierda». De este modo, ha avisado de un Almería muy similar al que se ha visto estas semanas: «no creo que sea que vaya a cambiar mucho, porque no tengo tiempo para hacerlo, por eso digo que todo lo que hagamos en el entrenamiento es lo que tenemos que salir a hacer en el campo a partir del sábado, que para eso son profesionales y están preparados para ello y tienen muy buena predisposición».
Hay futbolistas que le han comentado que a la altura de la semana en la que nos encontramos todavía no se ha hablado del Huesca,, y por eso «a partir de ahora sólo tenemos que hablar del siguiente partido» para conservar el objetivo de «alcanzar lo que hay arriba y no pensar en lo que hay por debajo». Es algo factible y no lejano, diferente a todos los demás equipos que ha cogido anteriormente, «con situaciones caóticas, todos estaban hundidos, en todos para salvar el descenso, y no es lo mismo trabajar de una forma que de la otra».
Para la afición sus palabras han sido de reconocimiento, sobre todo por las ganas que tiene de apoyar al equipo, «porque estar cuatro años en primera división hace mucho». También les ha pedido que estén con el equipo en todas las jornadas que quedan en casa «porque nosotros por trabajo no va a ser». De entrada, unos 50 aproximadamente les han acompañado en su primer entrenamiento desde la misma grada del Mediterráneo, y un grupo de ellos se ha adentrado en la sala de prensa para escuchar su intervención. Además, Baldomero Titos le ha dado la bienvenida en nombre de la Federación de Peñas y se ha llevado para casa un regalo muy dulce: roscos de Semana Santa. Lo de comerse los turrones parece que ya queda antiguo en el fútbol.
Un comentario
Que dificil es hacerlo bien en el futbol y ser reconocido. LUCAS ALCARAZ es un entrenador que me viene gustando. Como todos, estan siempre en la cuerda floja por los resultados. No ha hecho un mal trabajo. Ahora, solo quiero desearle buena suerte a «Boqueron» y que los resultados hagan cambiar la posicion en la tabla.