Lo primero que tienen claro los hombres de Francisco es que casi ninguno de ellos tendrá vacaciones hasta que el primer equipo concluya su trayectoria en la Liga Adelante. Su papel, aunque sólo sea de meros sparrings en los entrenamientos de Segunda, excepto Jonathan y Alberto, junto a Trujillo en dos ocasiones y Pallarés en una, que son los que han contado en las convocatorias, es de suma importancia para el club. Y es que hasta ocho jugadores del filial se han llegado a reunir en el anexo o en el campo principal cuando el Almería se ejercita.
Ya sabemos aquello de que la plantilla es corta y de que el ‘B’ debe tomarse como una extensión del primer plantel, pero es más que probable que eso haya perjudicado a Francisco, el míster, no sólo en el capítulo de bajas cada partido, sino en el ámbito de la mentalización de algunos de sus futbolistas. A buen seguro que habrá quien no se haya llegado a centrar del todo en la competición de bronce de nuestro fútbol. Así, la permanencia se ha conseguido sin jugar o perdiendo, ante resultados de terceros y cuartos equipos, y el filial casi va a marcar la raya del descenso a tercera cuando se había pensado, supuestamente, para otra cosa.
Otro capítulo que se abrirá con todas las consecuencias desde mañana mismo es el de las deudas a jugadores y parte del personal, lo que obligará al club a poner un aval sobre la mesa en breve. Ha habido y hay retrasos en algunos pagos y es una cuestión que de más o menos normal o llevadera se puede tornar complicada y seria para la entidad rojiblanca. Hoy toca despedir el ámbito deportivo, todo en ‘B’, el Almería, el Betis y la Segunda, y mañana comenzar a liquidar cuentas, con la ‘letra’ que tengan, y a planificar el futuro cercano, el de la próxima temporada. esto ya en el ámbito deportivo.
Ya precisamente en esa tesitura, realmente el partido de esta mañana tiene el único sentido del disfrute del juego, y qué mejor manera para los rojiblancos que ante otro filial, en lugar de con cualquier otra escuadra de ‘colmillos retorcidos’ ya por la veteranía y el oficio de vivir de esto del fútbol con lo justo. El equipo de Francisco es el último de los que no se juegan nada, con 47 puntos, y va a ver de cerca pero fuera de ella, la encarnizada lucha por mantenerse. El Betis B suma 59 puntos y está séptimo, con lo que se puede entender que su campaña ha sido buena. Marca mucho y encaja igual, 59 goles, lo que se entiende como que deja jugar. Nueve victorias como local y tres empates demuestran lo complicado que es en casa, pero el Almería B cuando mejor se ha sentido ha sido lejos del Mediterráneo.
Un partido de trámite o un partido de reivindicación, como se quiera tomar, es el que se va a disputar en Sevilla, pero Francisco, que renovará en breve como míster para el nuevo proyecto, esperemos que de filial de equipo de Primera División, comenzará a realizar los informes pertinentes sobre los jugadores que quiere que permanezcan y los que no le interesan. Con todo, hay que reconocer lo que esta plantilla ha hecho mirando a los lados y también mirando hacia arriba, cuando ha tocado ‘visitar’ a los ‘mayores’ y soñar que se quedan con ellos definitivamente.
