Será un rato de grandes emociones tanto sobre el terreno de juego como fuera de él. En cuanto a lo primero, no cabe otra cosa entre dos equipos que lo dan todo por el ataque y que buscan sus objetivos: el ascenso directo el Almería y alcanzar la promoción el Sporting dado su mal inicio de liga. En relación a lo segundo, el mítico Cundi estará en la grada deseando que su hijo, Rubén Suárez, dañe a su equipo del alma, el gijonés, porque ahora está enrolado con la UDA; además, el histórico Quini recordará muchas sensaciones obligado por una experiencia demasiado fuerte en su vida como fue la de su secuestro, ya que el primer partido que disputó una vez liberado fue una AD Almería – FC Barcelona vistiendo la elástica culé.
Encima, las dos últimas derrotas sufridas por los locales dan el tinte de choque trascendental por los antecedentes en cuanto a decisiones importantes por parte de la directiva del club. Será el partido número 101 de Esteban como portero rojiblanco de pantalón rojo, el que hace el número 79 de manera consecutiva sin probar el banquillo entre Primera, Segunda y Copa del Rey, y todo el mundo sabe que el guardameta asturiano es enemigo en el Sporting por aquello de la rivalidad regional y de sus inicios en el Oviedo. Un carbayón defiende la portería almeriense, y otro carbayón, como es Diego García, espera su oportunidad en el banco. Es mucho fundamento como para que no salga un choque excepcional, sumado a ello el ambiente de la grada con las 3.500 localidades comparadas por Cosentino.
El Almería sigue sin el añorado Jonathan, pero recupera a Rafita. Lesiones que van y vienen de manera natural, como no se puede entender de otro modo, pero esta vez acompañadas por una sanción absurda, la de Fernando Soriano, injustamente expulsado en el Nuevo Arcángel y que los servicios jurídicos del club, como viene siendo habitual, no han sabido defender donde hay que hacerlo para dejarla sin efecto. La expresión más usada en los medios es la de reencontrarse con la victoria, algo sin duda importante, si bien lo es más el seguir confiando en las posibilidades que se tienen y que no se han perdido en virtud del juego desarrollado. La UDA tiene sistema, es valiente, no guarda lo que para otros sería más que aconsejable, pero su atrevimiento le ha dado muchos puntos.
Por otro lado, el Sporting llega en clara progresión en busca de algo que parecía impensable cuando llegó Sandoval al banquillo como es la promoción de ascenso. Es un gigante que ha despertado, tarde, pero ha despertado, y jugarse con él un ascenso en sistema de play off no es demasiado aconsejable. Por eso el Almería tiene la doble oportunidad de entrar o seguir luchando por el ascenso directo y de dejar maltrecho a un rival temible en caso de no cazar la segunda plaza. Para la ocasión se ha vuelto a llamar a Abel Molinero, defenestrado durante jornadas y jornadas pero que por fin se volverá a vestir de futbolista. Si Gracia lo ve oportuno, al madrileño le va a caer la mejor oportunidad de reivindicarse. Es algo que día a día hace el que huele a supuesto titular, como es Rubé Suárez.
El Sporting, por su parte, jamás ha ganado en Almería, una racha que perseguirá romper y que se extiende al resto de la provincia, porque al Poli Ejido tampoco lo tumbó en Santo Domingo. Tendrá dos bajas importantes por sanción, como son los centrales Iván Hernández y Borja López, sustituidos por Bernardo y Gregory. El segundo de ellos precisamente está en una situación a la de Abel en la UDA, sin contar desde diciembre, pero el míster considera que está en un buen momento de forma. En todo caso, y eliminando paños calientes, el Sporting está claramente en el mejor momento de la temporada. Cayó derrotado en el tiempo extra ante el Villarreal, pero por lo demás está hecho un tiro, y su juego es de gran nivel. Quieren copiar en el Mediterráneo el sistema y la intensidad que han puesto en práctica ante el Girona y el Barcelona B, y Sandoval además tiene la parte romántica de que se estrenó en el banquillo asturiano justo ante los de Gracia en la primera vuelta. les salieron bien a los titulares en ese partido.
Árbitro Principal: MARTÍNEZ MUNUERA-JUAN Comité Valenciano
Cuarto Árbitro: GIL COSCOLLA-VICENTE Comité Valenciano
Árbitro Asistente 1: CANALES CERDÁ-DAVID Comité Valenciano
Árbitro Asistente 2: CHINCHILLA ORTEGA-SERGIO Comité Valenciano
Delegado-Informador: GALLO MORENO-JUAN JOSÉ Comité Andaluz
