Es muy aficionado a los toros y manda y templa no solo en el terreno de juego sino también en la sala de prensa. Su apodo de Mago tampoco le viene mal fuera del rectángulo verde, puesto que dice sin decir y el poso de sus palabras pesa una vez fuera de la chistera. Miguel Ángel Corona, el capitán de la UD Almería, ha escuchado desde el fondo de la sala la pregunta clave y sin perder la compostura ha salido airosa del lance. Él no sabe lo que tiene que hacer ya para contar desde el principio, pero sí sabe lo que pasará al final, y es que acabará disputando los partidos importantes sacando las castañas del fuego. Así no lo dice, pero así todos lo entienden.
Su papel en el equipo ha sido así en las temporadas pasadas, las más significativas las dos últimas, una para ascender y la otra para permanecer. Sin nervios tampoco por la situación actual, su sabiduría sale a la palestra cuando asevera con una determinación que solo dan los galones que tiene que acabarse ya de una vez por todas la comparación entre este equipo (plantilla) y el del curso pasado. Partido importante el del Córdoba de dentro de una semana y media, ha hecho valoración precisamente de este periodo de tiempo sin jugar por los compromisos internacionales de la Selección Española.
El ejemplo de lo que pasa entre el público rojiblanco y sus jugadores queda patente cuando se ha tardado casi una década en que surja la primera peña dedicada al talaverano. Es este jueves cuando inaugurará en Uleila del Campo la Peña Uleila Mago Corona. Responsabilidad en estado puro en sus palabras: «lo que sí que quiero y para lo que trabajo es para que mi papel sea de ayuda, para que sea importante para el equipo y que sea como lo fue en el tramo final de la pasada temporada, el cual considero que fue el más difícil». El capitán pone la calma, saca las ganas de competir y destierra las lamentaciones baldías. Lo suyo es mirar al frente.