Bien vale para un roto que para un descosido y su además su carácter sobre el césped es contagioso. Destila velocidad, poderío, agresividad -de la buena- y pasión. Su entrega es total, en forma de garra y de lucha. Y por si esto fuera poco, no anda corto de técnica individual, ni mucho menos. Esas son sus credenciales y ante su polivalencia y predisposición no cabe otra que sumarse al ‘Braveheart Power’, el poder de Juanma Ortiz.
Como el mito escocés, no da una batalla por perdida y no se va a arrugar ante tres partidos sin conseguir la victoria: «el perder estos partidos nos tiene que reforzar y saber que esto es difícil; quedan todavía muchos encuentros y tenemos que ser conscientes de que cada choque es muy importante porque son tres puntos que ya no están y cada vez el final está más cerca». El arrojo hay que acompasarlo con cabeza fría: «creo que tenemos que ir partido a partido sin pensar más allá del siguiente, el Valladolid, porque eso desvirtuaría al vestuario».
Con todo, el alicantino ha reconocido que «es un partido importante porque aparte de que es contra un rival directo, nos sacaría de esta racha un poco mala, pero no dejan de ser 3 puntos». No cabe duda de que será, eso sí, un encuentro radicalmente diferente a los de Elche y Recreativo, puesto que los pucelanos tienen otros valores: «ellos están con muchas ganas, más en su campo, vienen de ganar al Elche y contra un rival como nosotros». El rival está más que estudiado por parte del Almería: «sabemos que ellos nos van a plantear muchas contras con balón, y en ese sentido tenemos que saber responderles; el equipo está trabajando esta semana para ello y esperemos que nos salga un buen partido».
Todavía es prematuro para pronosticar el once que pondrá en liza Lucas Alcaraz, pero con Juanma Ortiz puede tapar cualquier hueco, y él encantado de que sea así: «yo me encuentro a gusto donde me ponga el míster, está claro que jugar ya es difícil y si juego me da igual donde juegue, así que donde el míster elija». Es cierto que de lateral, como dijo la semana pasada el propio técnico rojiblanco, tiene más posibilidades de llegada, algo que Ortiz ha compartido: «está claro que al jugar de lateral hay más espacios y más recorrido; al jugar de interior menos recorrido; pero eso no quita que yo esté más o menos a gusto en una posición o en otra».
Sabiendo que todo el equipo defiende, es cierto que siendo parte de la zaga su labor debe centrarse más en no recibir goles. Los ocho encajados en los últimos tres partidos no están afectado al estado anímico del vestuario, porque además ha tenido un componente de mala suerte muy elevado: «hay que saber como se han encajado y a partir de ahí mejorar, y la única manera de mejorar es trabajando y saber que no tenemos que encajar muchos goles». El equipo sí es consciente de los tantos que ha recibido, «pero también somos conscientes de que hemos jugado y de que hemos manejado muy bien los partidos y que los goles no han venido por avasallamiento, sino por acciones aisladas en las que hemos tenido esa mala fortuna».
El trabajo de la plantilla es el que se desarrolla en cada entrenamiento, además de la puesta en escena que supone jugar el partido. Pero la semana está cargada de esfuerzo y se aprecia una mayor intensidad cada jornada de preparación. Ese punto fue el que llevó a Alcaraz a felicitar a sus hombres : «la verdad es que ayer el equipo entrenó muy bien, hoy también hemos entrenado muy bien, y además cosas orientadas a lo que es el partido ante el Valladolid, que nos va a plantear un enfrentamiento muy difícil para nosotros».