De Trujillo y sus heridas de guerra a Lucas Alcaraz y su deseo de un Granada – Almería

El resumen de voces e imágenes de la noche mágica de las semifinales del play off se resume en rostros de satisfacción y calma entre el agotamiento físico y el deber cumplido. Más de dos horas de puro toma y daca concluyeron con final feliz para los rojiblancos, que ya en zona mixta atendieron a los medios de comunicación congregados, muchos, incluidos entre los de siempre los nacionales desplazados para un trabajo especial. Y es que con permiso de la Selección Española, el foco de atención doméstica en el fútbol de este país está depositado en la promoción de ascenso a la Liga BBVA desde la Liga Adelante. El favorito desde el principio es el Almería, que casi pudo con el Villarreal y que ha doblegado a un gran conjunto como es Las Palmas.

Trujillo mostró nariz herida y además llevaba dos puntos en la cabeza, todo ello de regalo por su lucha con los delanteros amarillos, que valora como de los mejores de la categoría. Él da a la UDA como favorita, y en esa línea, aunque con la suficiente prudencia, se pronuncian todos los demás que fueron pasando de camino al descanso de sus hogares. Así, el determinante Aleix Vidal, que marcó en Gran Canaria y que se inventó el 1-0 en el Mediterráneo, echó mano de la confianza, el veterano Esteban tiró de sabiduría, el experimentado Mejía destacó el buen hacer del último tramo de la competición, el bigoleador Charles derrochó solvencia, y el recordado Alcaraz, que había venido a apoyar a su ex Almería, deseó un derby muy especial.