Como decía el alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, durante la clausura de la Muestra de Teatro Aficionado de la ciudad «casi sin tiempo para tomar un respiro», empezamos la XXXV edición del Festival de Teatro de El Ejido. Ya han pasado 35 años desde que un grupo de aficionados se pusiera a organizar funciones más o menos improvisadas en la calle. 35 años, con sus altibajos, que han traído a El Ejido y a Almería a lo mejor del teatro nacional e internacional. 35 años, que desde mañana jueves, con la primera subida del telón, vuelven a revivirse.
La ceremonia de cierre de la Muestra e inauguración del Festival, que duró algo menos de dos horas, arrancó con una cuenta atrás, donde los segundos se intercalaban con imágenes de los 23 grupos locales que, salidos de las escuelas de teatro municipal, han dado una cosecha de más de 400 actores aficionados, sí, pero con una pasión que puede superar a la del profesional.
En la edición de este año, unas 6.500 personas, según cifras que dio el concejal de Cultura, José Andrés Cano, han asistido a alguna de las 24 funciones. «Por la afición que hay, bien vale la pena el esfuerzo y los recursos que hemos dedicado», dijo el concejal.
Tras la actuación de la bailarina ejidense afincada en Barcelona Nalia Palmero, llegó la hora de la entrega de diplomas a todas las compañías que han participado. En la entrega se turnaron el concejal y la diputada de Cultura de la Diputación de Almería, María Vázquez.
La diputada recordó que buena parte del teatro callejero que se podrá disfrutar durante el Festival de Teatro que comienza mañana procederá de la propia Almería, tras un acuerdo entre la Diputación y el Ayuntamiento.
En uno de los momentos más divertidos y hasta hilarantes de la noche, se proyectaron una serie de vídeos protagonizados por niños del colegio Gabriela Mistral. En una versión que recordaba al programa de televisión Juego de niños, explicaron a su manera qué eran los actores: «hacen el teatro para hacer reír a los niños», decía uno; o qué era el Teatro, «un lugar donde hay muchas sillas», explicaba otro.
La noche acabo con la inauguración oficial del XXXV Festival de Teatro por parte del alcalde, una cita que «es hoy en día el primer festival de Andalucía». Y para corroborarlo, el bailarín Rafael Amargo subió al escenario para poner el colofón a la noche en una actuación sorpresa.
Sólo es la primera de la muchas sorpresas que, desde mañana jueves, nos vamos a encontrar en cualquier plaza de El Ejido.
