Con una paciencia infinita y sin perder esa dulzura y amabilidad que transmite, Verónica Forqué (Madrid, 1995) atiende a Almería360 en su sexta entrevista. Y eso sólo ha sido este viernes. En lo que va de gira con su Shirley Valentine asegura haber hecho más de 500. Y sin embargo, sus respuestas no son las cansinas que suelen dar las estrellas del fútbol (y algunas del cine y el teatro). En cada una de las preguntas sigue mostrando la pasión que hace ya mucho tiempo la hizo dedicarse al teatro. Esta noche, en el Auditorio de El Ejido, se meterá en la piel de Shirley Valentine, escrita por el británico Willy Russell y dirigida en su versión española por Manuel Iborra.
¿Me presentas a Shirley Valentine?
Es una mujer que vive en Liverpol, lleva ya muchos años casada con Joe. Tuvo dos hijos que ya se fueron de casa. Su gran compañera es la pared de su cocina. Habla con ella, siempre la escucha y nunca le lleva la contraria. Es una imagen muy triste, pero a la vez poética. De pronto se da cuenta de que tiene público y comienza a viajar por su historia, por su pasado, dándose cuenta de que la vida se le está escapando. Una mañana, una amiga suya que es muy feminista la invita a pasar 15 días de vacaciones en Grecia y sólo la idea de visitar ese país, ver y sentir el sol que no tiene en Liverpool, la pone del revés.
Siendo de Liverpool, ¿que le puede decir Shirley a las mujeres de El Ejido, por ejemplo?
Las mujeres de El Ejido van a entender a Shirley como las de Barakaldo, Salamanca o Madrid. El mundo está lleno de Shirleys. Todas nuestras madres lo han o están siendo. Han renunciado a sus vidas por la familia, por cuidar de sus hijos en una obra que nadie valora. Se sienten solas y poco amadas.
¿Es una obra femenina? ¿Algunos hombres se mostrarán inquietos en sus butacas o esbozarán una falsa sonrisa?
Los hombres no se sienten agredidos. Shirley no critica a los hombres, ni siquiera al suyo. Cuenta una historia, la suya, en la que se da cuenta de que está en la parte final de su vida y tiene en su mano la oportunidad de por una vez ser feliz.
¿Qué hay de Verónica en Shirley?
Todo. En todos los personajez estás tú. Está en mí pero soy yo. Tiene mis penas, mis alegrías y mis ilusiones. Como ella, llevo muchos años casada, soy madre y ama de casa. Pero yo tengo más que ella, tengo el teatro que me hace muy feliz. Soy más visible, ella es invisible. Pero hay mucho de ella con lo que me identifico, yo también he dejado sueños en el camino.
¿Al final se va a Grecia?
No te lo pienso decir. Ni yo misma lo sé. Tendréis que venir esta noche al teatro para averiguarlo.
Saliendo de Shirley Valentine, ¿Verónica Forqué y el teatro están sufriendo esta crisis económica?
Es económica pero también moral. Con la crisis los ayuntamientos no contratan como antes por falta de dinero. Shirley Valentine va a hacer 100 representaciones pero una obra como esta se merece muchas más. La cultura es lo primero que se recorta. Por eso el Festival de El Ejido es una cosa milagrosa y es algo que tenéis que cuidar.
* Escrita por el británico Willy Russell y dirigida en su versión española por Manuel Iborra, Shirley Valentine podrá disfrutarse esta noche a las 22 horas en el Auditorio de El Ejido.
