El Sindicato de Enfermería, SATSE, en Almería ha denunciado la precariedad laboral a la que están sometidos los profesionales de Enfermería de los centros hospitalarios, cuya causa principal es el déficit de personal.
Tanto es así, recuerda SATSE, que actualmente la media de ratio que poseen los hospitales públicos es entre 16 o 18 pacientes por enfermera o enfermero. Una cifra, lamenta el Sindicato, bien alejada de la ratio adecuada y segura que se sitúa entre 6 y 8 pacientes por cada enfermera/o como máximo.
Los datos extraídos de un estudio realizado por el Sindicato reflejan que Andalucia necesita un total de 34.593 enfermeras y enfermeros para alcanzar, al menos, la media europea en toda la Sanidad, pública y privada. La ratio de estos profesionales por 1.000 habitantes en Almería es 4,18, mientras que en Europa es 8,8 enfermeras y enfermeros por 1.000 habitantes, y la media de España es 5,3.
Así, explica SATSE, una de las consecuencias de mantener plantillas con ratios por debajo de las indicadas es que aumenta el riesgo de mortalidad en 1,37 veces en comparación con una asignación menor de pacientes por cada enfermera.
Por contra, por cada incremento de un 10 por ciento en el número de enfermeras en unidades de hospitalización general, disminuye en un 7 por ciento la probabilidad de que muera un paciente hospitalizado.
El Sindicato de Enfermería asegura que esta falta de enfermeras y enfermeros es crónica en los hospitales públicos de Almería, donde el número de profesionales por turno no ha cambiado en las últimas décadas.
Reivindicación que se viene realizando desde hace largo tiempo en el Sindicato, el cual recibe quejas continuas por parte de los propios profesionales de Enfermería que ven cada día más dificultades para realizar cuidados de calidad por la ausencia de personal que existe.
Un déficit que además se hace aún más patente durante los turnos de tarde, noche, festivos y fines de semana donde solo hay dos enfermeras para atender hasta 36 pacientes.
SATSE recalca que esta escasez de profesionales se suma a las «difíciles condiciones laborales» que tienen las enfermeras y enfermeros de Atención Especializada, como el trabajo a turnos y nocturno o en fines de semana y festivos, la rotación por unidades y servicios o la falta de sustituciones.
Todo esto sin olvidar que tienen que atender a pacientes con todo tipo de patologías y necesidades de cuidados y atención, lo que requiere de ellas una sobrecapacidad de adaptación a un entorno laboral muy complejo y cambiante .
Finaliza el Sindicato de Enfermería, que adecuar las ratios de plantillas es una medida urgente que el SAS debe poner en marcha en toda Andalucía, pero muy especialmente en la provincia de Almería, ya que ello supone ofrecer una atención sanitaria más segura, humana y de mayor calidad para los pacientes, así como un alivio a la sobrecarga laboral de los profesionales, repercutiendo, por ende, positivamente en su salud, en la seguridad en su trabajo y en el sistema de salud.
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