El equipo de Gobierno de Vícar, con su alcalde Antonio Bonilla a la cabeza, se ha mostrado consternado por la noticia de presuntos abusos contra la libertad e indemnidad sexual en personas en riesgos de exclusión social, presuntamente realizados por un miembro de una ONG con sede en este municipio, y que ha llevado a su detención por parte de la Guardia Civil, dentro de la operación Asuero.
Desde el gobierno local se lamenta cualquier manifestación de abuso y especialmente contra aquellos colectivos más vulnerables, a la vez que se condenan expresamente estos hechos los cuales se consideran un caso aislado, dentro del funcionamiento que asociaciones y colectivos sociales llevan a cabo en el municipio, «por lo que estos hechos no deben afectar al resto de quienes realizan una labor de entrega admirable en favor de las personas más desprotegidas».
Igualmente se señala que «afortunadamente los ciudadanos y ciudadanas de nuestro municipio han destacado siempre por su generosidad y apoyo hacia los colectivos más desfavorecidos, por lo que acciones como la denunciada no deben hacer minar esta capacidad solidaria altamente demostrada».
Finalmente, los responsables municipales muestran su total confianza en que la instrucción policial permitirá esclarecer los hechos en su totalidad y que la acción de la justicia recaerá sobre los responsables de tan deleznables abusos».
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