Más de sesenta escolares de Almería han tenido que cambiar de colegio nada mas empezar el curso 2014-15. Han sido 62 chavales los que, de los 151 que han sido objeto de investigación por parte de la Delegación de Educación, han demostrado haber cometido fraude en el proceso de escolarización. Cerca de una veintena de reclamaciones de particulares despertaban la alerta en diez centros educativos, cinco de ellos concertados.
Han sido los padres de los menores que han quedado fuera de su centro de referencia los que han reclamado después de sospechar que pudieran darse determinadas irregularidades.
La mayor parte de los fraudes se cometen con el empadronamiento de los padres en una segunda residencia no habitual o en viviendas de alquiler que posibilitan una aproximación al colegio deseado. En estos casos, la Policía Autonómica y la Policía Local son las encargadas de comprobar que la familia denuncia reside de forma efectiva y habitual en la vivienda de referencia para emitir un dictamen.
Durante el pasado curso, la Junta llevó a cabo la investigación de 116 casos a raíz de 29 reclamaciones, de forma que finalmente se registraron 22 reubicaciones de alumnos a causa de algún tipo de fraude durante el proceso de escolarización. En este caso, se investigaron diez centros de los que tres eran concertados.