La Universidad de Almería ya ha comenzado a aplicar medidas económicas acordes con los recortes presupuestarios planteados por los gobiernos central y autonómico. Este lunes, el rector de la UAL, Pedro Molina, anunciaba los primeros cambios de un plan de eficiencia que estará listo en las próximas semanas para que pueda ser aprobado por el Consejo de Gobierno. Molina ha señalado que el equipo de gobierno pasará de los 9 vicerrectorados actuales a cinco. Tras una reunión mantenida con su equipo de gobierno, Molina ha destacado la generosidad de todos los vicerrectores, que han puesto su cargo a disposición hasta que se dé a conocer el nuevo equipo, que será en los próximos días.
El plan contempla, entre otras actuaciones, medidas de racionalización de la estructura académica del Rectorado, de racionalización en la estructura de las facultades y departamentos y cambios en la estructura administrativa y de gerencia.
El máximo responsable de la UAL también ha destacado que la universidad emprenderá medidas que afectarán a la estructura de facultades y departamentos que no deben entenderse como un paso atrás. “Las decisiones se toman en unas circunstancias y deben cambiar cuando cambian esos parámetros”, ha dicho Pedro Molina. Por otra parte, los cambios en la estructura administrativa y de gerencia ya se están produciendo con la puesta en marcha, en el edificio central del campus, de la Secretaría Única de la Universidad de Almería. El ARATIES (Servicio de Atención Integral al Estudiante) engloba en un mismo departamento a todas las anteriores secretarías de las distintas facultades y centros. En la actualidad, trabajan en este servicio 80 personas y su creación ha supuesto un ahorro de 6 millones de euros en el presupuesto de la Universidad de Almería para el curso 2011/12.
Con todas estas medidas, el rector ha anunciado que la Universidad de Almería ahorrará entre 2,2 y 2,4 millones de euros en su capítulo 1, el destinado a personal. En la actualidad, el presupuesto de la UAL para este capítulo es de 52 millones de euros, con lo que reducir ese montante en más de 2 millones debe entenderse como un “esfuerzo muy considerable”.
En esta dinámica de ajustes se incluyen actuaciones en infraestructuras para optimizar consumos de electricidad, agua y uso del suelo que, sumadas a las medidas anteriores y a las que ya se habían adoptado con anterioridad (como, por ejemplo, la revisión de las condiciones para los proveedores, medidas de ahorro energético y eliminación de los gastos de atenciones protocolarias y de representación), supondrán el ahorro de 3.531.640 euros entre 2012 y 2013. Con ello se conseguirá el objetivo de que la UAL no supere el 1,5 % de déficit total.
Todas estas medidas se toman para adaptar a la Universidad a las necesidades presupuestarias actuales y a las exigencias anunciadas por el Gobierno central y la Junta de Andalucía. Las decisiones tomadas desde Madrid han sido la reducción, por una parte, del presupuesto de Educación para 2012 en un 21%, oficializado en los Presupuestos Generales del Estado (que establece además el recorte en un 41% del presupuesto destinado a las becas Erasmus, 37 millones de euros menos para este programa) y, por otra, los recortes de más de 3.000 millones de euros contemplados en el R.D. 14/2012, de 20 de abril, de medidas urgentes de racionalización del gasto público en el ámbito educativo. Las decisiones adoptadas por el Gobierno harán que hasta 2015, el peso de la educación pública se reduzca del 4,9% al 3,9% del PIB, según el documento de ajustes enviado por el Ejecutivo a Bruselas.
Además de todo ello, las universidades públicas andaluzas se verán obligadas a recortar 130 millones de euros, con la puesta en práctica de políticas como las compras conjuntas y otras que se irán definiendo en los próximos meses por parte de la Junta de Andalucía. “Quiero manifestar que estas medidas permitirán, en la situación actual, el mantenimiento de los contratos y la calidad en la docencia y en la investigación, que las decisiones que se adopten van en la línea de las que se han tomado ya o van a adoptarse en el resto de las universidades públicas españolas y que todo ello se hará, como se ha hecho hasta ahora, desde la transparencia, la solidaridad y el rigor absoluto”, señalaba el Rector.
La línea roja de las medidas, los trabajadores a tiempo completo
“En todos los casos, las medidas que se están tomando se plantean con el fin de evitar en lo posible otras soluciones alternativas, que mermen gravemente la calidad de la docencia y de la investigación, y que pongan en peligro el mantenimiento de los puestos de trabajo. En este mismo sentido, mis objetivos prioritarios son dos conservar el empleo de los trabajadores y mantener la calidad de la docencia y la investigación. Para cumplirlos, necesitamos gastar menos (ahorrar) y gastar mejor (ser más eficientes)”, ha expuesto Molina, que ha dicho que la línea roja de cuantas medidas se tomen serán los trabajadores que tienen dedicación en la Universidad de Almería a tiempo completo.
En este sentido, ha explicado que la no renovación del profesorado asociado no es una medida contemplada en el Plan de Eficiencia de la UAL, sino consecuencia de la aplicación del R.D.14/2012. “Esto profesores tienen su actividad principal fuera de la universidad, tienen otro trabajo y el de aquí es secundario. Por lo tanto, es una pérdida que lamentamos, pero la prioridad es conservar el empleo de los trabajadores, de los que sólo tienen trabajo aquí en la universidad sin ninguna otra dedicación principal”, ha dicho Molina, que ha destacado también que todas las actuaciones que se aprueben a partir de ahora “repartirán el sacrificio que deba hacerse entre todos los colectivos que integran la Universidad, sin afectar exclusivamente a un sector determinado”.
Menos becas
En su intervención, Pedro Molina también ha hablado de las consecuencias que tendrá la aplicación del R.D. 14/2012, que afectará, a partir del próximo curso, al precio de las matrículas, al número de becas y requisitos de acceso, al aumento de la nota media para la obtención de becas, que pasa del 5 al 5,5, y a la regulación de la gestión financiera de las universidades. Según se desprende de lo contemplado en este decreto, en el curso 2012/13 habrá una disminución tanto de los beneficiarios como de las ayudas para becas.
Según las estimaciones realizadas por el Vicerrectorado de Estudiantes, Extensión Universitaria y Deportes, con la aplicación de los nuevos requisitos académicos para obtener beca, el número de beneficiarios en la Universidad de Almería pasará de 3.890 este curso a 3.553 el curso que viene, es decir 337 becarios menos. El curso 2012/13, la cuantía de las ayudas será de 2.824.159 euros menos que en el curso 2011/12. Esta rebaja sería fruto, por un lado, de la disminución de becarios y, por otro, de aquellos estudiantes con rentas más bajas, que perderían las ayudas compensatorias recibidas al no cumplir los nuevos requisitos académicos incluidos en este Real Decreto.
Ajuste en infraestructuras
En materia de infraestructuras se acometerán medidas para optimizar los consumos tanto de electricidad como de agua, así como el uso que se hace del suelo en el campus. En materia de agua, el consumo es, actualmente, de 30 euros por persona al año. El objetivo para el próximo curso es que este consumo se quede por debajo de los 70 mil metros cúbicos anuales de toda la Universidad, lo que supondrá un gasto de 10 euros por persona.
Para ello se han instalado ya contadores en todos los edificios para tener un máximo control del gasto, se van a cambiar los tubos de agua de fibrocemento a pvc, dejando la red antigua de tuberías para riego (sin coste para la universidad pues es agua de pozo) y una nueva para el agua potable y habrá también una optimización de jardines y zonas verdes, con la reducción de la pradera de césped y plantación de especies de menor consumo.
Por otra parte, en electricidad se ha logrado un ahorro este curso de 85.000 euros y en suelo, la Universidad de Almería ha experimentado un crecimiento que requiere habilitar nuevos espacios y optimizar los ya existentes.
