La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) ha publicado una sobre determinados lotes de tintas y agujas de tatuaje comercializados por una empresa norteamericana que pueden estar contaminados microbiológicamente y ha pedido que no se adquieran ni se utilicen por parte de las empresas dedicadas a la prestación de este tipo de servicios.
Se trata de la empresa White & Blue Lion, Inc. que ya ha retirado voluntariamente del mercado determinadas unidades de tintas y agujas porque su uso puede ser un riesgo para la salud humana. Las tintas de tatuaje comercializadas por esta empresa no están autorizadas por la Aemps, por lo que incumplen la legislación española y no deben adquirirse ni utilizarse.
Así, las agujas de tatuaje están reguladas por la legislación de productos sanitarios y deben cumplir los requisitos esenciales que en la misma se establecen, según Sanidad, que explica que los datos del etiquetado deben figurar al menos en español e incluir siempre el nombre y la dirección del fabricante.
La Unión de Consumidores de Almería-UCA/UCE ha dicho que le resulta inquietante que desde la propia Administración Pública se pueda admitir «la posibilidad de utilización ilegal de este tipo de productos y solicitamos aclaración sobre si se tiene constancia de casos de afectados o de canales de comercialización ilegales en nuestro país para realizar esta alerta».
Los lotes de tintas de tatuaje afectados por esta retirada indican en su etiquetado Lot No. OR20036, Batch #8 y Best if used by: 16/12/16, mientras que las agujas retiradas llevan el marcado CE acompañado del número 0197, pertenecen a los lotes 20138, 201307, 201312, 201402, 201311, 201310, con fecha de caducidad junio 2018, y no identifican el nombre y dirección del fabricante. Según la AEMPS, este marcado CE podría ser falso.
Por ello, la Unión de Consumidores de Almería-UCA/UCE ha exigido que se realicen inspecciones exhaustivas de centros dedicados a la prestación de estos servicios con el fin de garantizar que no se cuenta en ellos con productos peligrosos desde un punto de vista de la salud. «Así, entendemos que la inspección de Consumo debería actuar convenientemente y conjuntamente con las de Salud con el fin de garantizar que todo producto que se esté aplicando goza de licencia para ser comercializado y utilizado en España», aseguran desde UCA.