En la provincia de Almería, y repartidos entre el Complejo Hospitalario Torrecárdenas, el del Poniente en El Ejido y el de La Inmaculada en Huércal Overa, medio millar de profesionales del sector han mostrado su repulsa a las medidas propuestas por el Gobierno, todos ellos bajo el lema general de ‘Con la Sanidad no se juega’. Los sindicatos presentes en el sector sanitario han unido sus fuerzas para mostrar la desconfianza que tienen sobre las medidas de ahorro adoptadas por el Ministerio de Sanidad el pasado 24 de abril.
Para Antonio Moreno, responsable de este sector en el CSIF, los ajustes ministeriales «lo único que propician son desigualdades en los ciudadanos y una bajada en la calidad de las condiciones laborales del personal sanitario». En esta línea, ha abundado en el fondo de la cuestión afirmando que se afecta a los derechos básicos de los ciudadanos, ya que el resultado último de cara al usuario será que el ‘ahorro en profesionales’ conllevará el cierre de centros, la reducción de camas, de equipos, de quirófanos o de tratamientos. A corto plazo, las reducciones afectarán principalmente a los desplazamientos en ambulancia de un colectivo determinado de enfermos, así como al copago de los medicamentos, ante lo que Moreno ha manifestado que «es lamentable que el Ejecutivo haga esfuerzos superlativos por las entidades bancarias y no haga lo mismo para sostener la sanidad y la educación pública».
Por parte de UGT, Juan Carlos Fenoy, Secretario de Sanidad y Servicios Sociosanitarios de la FSP, ha apuntalado que los 7.000 millones de recorte van a provocar que la asistencia sanitaria sufra mermas, y de hecho «los recortes ya se están notando, van a suponer un claro deterioro de las condiciones de calidad sanitaria, de las condiciones laborales y de la salud de muchos pacientes que no van a poder pagar su salud». Entre las consecuencias de estos recortes, González Fenoy ha advertido de que “el ciudadano tendrá que asistir a unos centros médicos con menos personal, se incrementarán las listas de espera y la sobrecarga asistencial para los profesionales, ya que no se están sustituyendo las bajas”. De hecho, ya «se están eliminando puntos de urgencias, cerrando centros y privatizando hospitales», asegurando que «se van a perder miles de puestos de trabajo, se va a disminuir de la calidad asistencial y se va a perjudicar a los más débiles con el copago sanitario».
Para USTEA-ASTISA, y en palabras de Lola Jiménez, su responsable del Sector Sanitario, se va a perder lo que en la actualidad es una realidad constatado, como que «la sanidad pública andaluza es de las mejores de España y de Europa; hemos pasado en 30 años de estar en la cola a estar muy arriba, y en muchas ocasiones el usuario no es consciente de los avances que tiene Andalucía en materia de salud». Jiménez ha hablado de falta de claridad, ya que realmente «el tipo de recortes podemos preverlos con lo que está pasando en las comunidades que están gobernadas por el PP». En relación a las condiciones laborales de los empleados y el aumento a 37 horas y media semanales, la responsable de USTEA ha puesto el acento en «los miles y miles de contratos que se van a destruir y que se generaron cuando se establecieron las 35 horas». Tiene claro que los recortes «van a incidir directamente en la salud del ciudadano», teniendo en cuenta que tendrá menos personal a su servicio y que el que quede estará saturado de trabajo.
En conclusión, que los sindicatos sanitarios de todo el país rechazan las medidas del Gobiernos de copagos y ‘repagos’, porque recaen sobre los más débiles, que son los más enfermos y los más mayores, y están en contra de los presupuestos del ahorro en necesidades básicas y los recortes adicionales en sanidad, porque nos afecta a todos, y la Salud no puede ser objeto de mercadeo.
MEDIDAS PROPUESTAS POR LOS SINDICATOS SANITARIOS:
* Que se incrementen y mejoren los servicios públicos sanitarios.
* Que se reforme la gestión del sistema para optimizarlo y sin tomar sólo medidas económicas que recaigan en los usuarios y en los profesionales.
* Que se proteja y se cuide a los profesionales sanitarios.
* Que haya consenso con los representantes de los profesionales y que no se tomen medidas por Real Decreto que afectan a todos.
* Que se apueste por la coordinación entre el sector sanitario y sociosanitario, y se realice mayor inversión en Atención Primaria.
* Movilizaciones en toda la provincia en defensa de la Sanidad
