La Central Sindical Independiente y de Funcionarios ha dado a conocer el resultado de una muestreo muy amplio fundamentado en valorar por parte de los maestros la socorrida ‘tarea’ para casa a los alumnos. Prácticamente todos los encuestados, un 95%, han coincidido en que los deberes bien planteados contribuyen a fomentar de manera fundamental el valor del esfuerzo. El sindicato, que es el mayoritario en el sector de la enseñanza, ha entrevistado para este estudio a un total de 1.051 docentes.
El motivo de haber realizado la encuesta ha sido que el mes pasado la Federación de Consejos de Padres de Alumnos de Francia convocó una huelga de deberes de dos semanas para protestar contra lo que llamaron ‘trabajos forzosos’ fuera del horario lectivo. Eso nos toca más de cerca cuando se ha comprobado que los argumentos esgrimidos en el país vecino son compartidos en gran medida por la Asociación de Padres y Madres de alumnos de España. El punto ha llegado a tal extremo que se ha señalado que los deberes «no sirven de nada y son antipedagógicos». Además, sendos colectivos opinan que la tarea causa tensiones en la familia, «obligando a padres y madres a ejercer de profesores, alargando innecesariamente la jornada de seis horas, impidiendo que los niños dediquen tiempo a la lectura y contribuyendo a aumentar las desigualdades entre alumnos que pueden beneficiarse de la ayuda de sus padres y los que no».
La realidad actual es la de que más del 82 por ciento de los docentes andaluces mandan deberes para casa a sus alumnos, y según los datos que arroja el estudio de CSIF, el 88% de los padres aprueban esta tarea y un 61% de ese porcentaje anterior incluso la reclama. Respecto al concepto de desigualdad antes referido, el 87,5% de los docentes ha explicado que las tareas están diseñadas para ser realizadas por los alumnos sin ayuda de sus progenitores, ya que se demuestra que los deberes se mandan sobre materia dada y explicada suficientemente.
Por último, otro de los aspectos que aborda esta encuesta es el tiempo dedicado a la realización de tareas en casa, donde los profesores y maestros han respondido que el considerado idóneo debe rondar una hora, si bien también se han pronunciado sobre una extensión de media hora y hasta las dos horas, pero de manera minoritaria. Respecto al tiempo libre para jugar o dedicarlo a la lectura, un 92% de los docentes muestran su preocupación porque el alumno disponga de este tiempo, considerando igualmente que los estudiantes necesitan un descanso para realizar actividades que les diviertan. En definitiva, que las tareas para la casa son un aliado fundamental para conseguir desarrollar e integrar el valor del esfuerzo entre los escolares.